Muchas veces los rumores se convierten en realidad, y estamos ante uno de esos casos y no es precisamente una operación menor: Google se ha hecho con el equipo de HTC que fabrica los teléfonos Pixel. Por lo tanto, los de Mountain View vuelven a disponer de todo lo necesario para considerarse un fabricante de hardware. El montante de la operación es de 1.100 millones de dólares.
Las cosas se han precipitado desde el día de ayer cuando se conoció que en algunos mercados las acciones de HTC suspendían su cotización y, tal y como se esperaba, se ha conocido de forma oficial que Google se hace con parte del negocio de smartphones de HTC. Y, esto, ocurre unos días antes de la presentación que tendrá lugar el día 4 de octubre en la que se espera el anuncio de varios dispositivos de esta compañía (smartphones entre ellos). Veremos si este movimiento se optimiza mejor que la compra de Motorola por parte de Google de hace unos años.
El caso, es que desde ahora el «Made by Google» tendrá más sentido que nunca, ya que la compañía de Mountain View se hace con todo el equipo responsable de HTC en la fabricación de sus teléfonos Pixel (sustitutos de los Nexus). Según Peter Shen, director financiero de los taiwaneses, son 2.000 los empleados que asume Google, y no son precisamente unos extraños, ya que han estado implicados en el desarrollo de los últimos terminales del creador de Android.
Por cierto, como parte del acuerdo oficial al que han llegado Google y HTC se incluye el tener la licencia, no de forma exclusiva, de la propiedad intelectual del fabricante taiwanés. Por lo tanto, los de Mountain View pueden acceder a todas las innovaciones que esta tenga y desarrolle -siempre en el marco de la gama de movilidad-, e implementarla sin coste alguno en sus productos, ya sean smartphones u otros accesorios.
Qué significa la compra para Google
Pues que la parte de la compañía controlada Rick Osterloh, vicepresidente de hardware de los norteamericanos, ahora tiene una personalidad propia y, también, los elementos necesarios para seguir avanzando para posicionarse como uno de los fabricantes de referencia en el mercado de dispositivos móviles. Por lo tanto, y según sus propias palabras «la gran apuesta que Google está haciendo por el hardware desde hace unos años tiene su continuidad».
Sea como fuere, Google se convierte de un plumazo en una compañía que tiene controlado su propio hardware y que desarrolla el software que se integra. Es decir, que se parece más a Apple, pero sin llegar a ser tan cerrado como esta… al menos por el momento. El caso, es que pocas empresas a nivel global tiene ahora mismo un negocio tan estructurado como los de Mountain View… y veremos cómo les sienta este movimiento a otros fabricantes, como por ejemplo Samsung.
Cómo queda HTC tras la compra de Google
Evidentemente la inyección económica para esta compañía era muy necesaria -así como el desprenderse de una parte de su plantilla-. Y, ahora, tiene una solvencia que le hará poder hacer foco en los negocios que sí le están reportando grandes perspectivas, como por ejemplo el propio de la realidad virtual, donde es líder gracias a las gafas HTC Vive.
Además, y debido a los acuerdos, se reserva la opción de seguir avanzando en la tecnología para dispositivos móviles e, incluso, tendrá la posibilidad de lanzar nuevos terminales con su propia marca. Y, esto, habla de un buen acuerdo al que ha llegado HTC con Google, ya que la compra no es tan restrictiva como la que en su momento se produjo entre Microsoft y Nokia. El caso, es que mantiene su personalidad y cierta independencia, pero si que ha perdido el mejor equipo para desarrollar smartphones, que se lo ha llevado Google.
¿Cuándo será efectivo el acuerdo entre Google y HTC?
Pues se apunta a principios del año 2018, ya que este es el tiempo que se cree que tardarán en aprobar la transacción las autoridades que intervienen en la compra de Google de parte del negocio móvil de HTC por 1.100 millones de dólares (en efectivo). Por lo tanto, todo parece que se finalizará bastante rápido. Y, una vez que se ha conocido esto, y ante la presentación del día 4 de octubre, ¿estaremos ante el último teléfono de Google, concretamente el Pixel 2 XL, fabricado por un tercero?