La Nintendo Switch sigue siendo la consola fetiche para muchos de los que combinan el juego en el televisor con la portabilidad. Sin embargo, con el paso de los años, su precio no ha disminuido tanto como se esperaba. Si estás pesando en comprar una de segunda, presta atención a los principales peligros para no perder tu dinero.
Comprar en reventa implica varios riesgos a los que no solemos exponernos cuando compramos un producto nuevo. Y, no, no es lo mismo que el reacondicionamiento. La segunda mano implica confiar en el anterior propietario y el uso que le ha dado a la Nintendo. Aunque de primeras la consola puede lucir cuidada, debes revisar que su interior esté igual de reluciente.
Para evitar derrochar dinero en una consola de reventa, lo mejor es pedirle al comprador que haga una serie de comprobaciones previas. Al igual que se puede pedir la vida útil de la batería, hay otras características que se deben tener en cuenta.
Penalización del anterior dueño
Aunque es cuestión de suerte, hay varios compradores que se han enfrentado a los malos usos de los anteriores dueños. Como es una de las más vendidas en los últimos años, es muy común encontrar ofertas en Wallapop o Milanuncios a un precio mucho más asequible que si la compras nueva. Sin embargo, comprar consolas usadas implica tener que lidiar con problemas en software o físicos.
El peor que puede aparecer es que tu Nintendo Switch tenga una prohibición de uso. Si al encenderla te aparece un código de error que te indica que la consola ha sido prohibida, ¡cuidado! Es posible que el anterior dueño realizase actividades fraudulentas y penalizadas por el fabricante. Bien puede ser por hacer trampas en los juegos o por piratearla. Esta penalización hace que la consola se que inservible cuando se conecta a Internet.
Aunque acudas al servicio técnico de Nintendo y expliques tu situación, es probable que no encuentres solución. No importa que no hayas sido tú quien infrinja las normas, no van a eliminar el veto de la consola. Así que para curarte en salud, antes de comprarla, pídele al dueño que te demuestre que puede jugar de forma online.
¿Vale la pena comprar de segunda mano?
Comprar una Nintendo Switch usada puede ahorrarte algo de dinero, pero es posible que a largo plazo no valga la pena. Aunque en algunas ventas el vendedor añade juegos al pack, dependiendo del precio y el estado de la consola, es posible que sea mejor que ahorres un poco más para comprar una nueva Switch.
Lo normal es que este tipo de consolas duren muchos años, aunque si es muy antigua no te servirá la garantía. En esos casos, es mejor ahorrar un poco más y comprar una nueva con tus años de garantía intactos y la asistencia profesional en cualquier momento. Así te aseguras de que funcionará correctamente.
Piensa en que si te puedes ahorrar 100 euros, está en buen estado y trae juegos, es una buena oportunidad. Incluso, puedes comprar juegos de segunda mano para ahorrar más aún. De hecho, puedes pensar en comprar una Nintendo Switch nueva y elegir juegos de segunda mano. Así ahorrarás sin poner en riesgo la garantía ni el uso de la consola.
Es cierto que si compras un modelo reacondicionado en los principales marketplace, como Amazon o MediaMarkt, te asegurarás de que un experto la haya revisado y se cerciore de que funcione. Además, incluyen un año de garantía por si dejase de funcionar. Si te lo has pensado mejor y quieres apostar por un modelo sin usar, escoge tu tienda favorita y cómprala al mejor precio.
Aun así, ten en cuenta que se esperan lanzamientos de nuevos modelos de Nintendo Switch todos los años. Pese a que no se confirman, lo normal es que el precio de los antiguos modelos bajen considerablemente. Por eso, es conveniente estar atento para aprovechar este tipo de ofertas y evitar comprar consolas en reventa.