Las tarjetas SD tienen futuro como sustitutas de los discos duros
El avance de las tarjetas SD en lo que tiene que ver con su rendimiento ha ido aumentando de forma paulatina y, pese a las dudas que se pueden tener respecto a si han llegado a su techo tecnológicamente hablando, parece que esto no es así por el momento. Esto lo decimos debido a que con el anuncio de una nuevo estándar para estos accesorios se acerca su rendimiento al que ofrecen lo discos duros -incluidos los SSD-.
El anuncio y llegada de UHS-III es la que permitirá a las tarjetas SD dar un salto cualitativo en lo que tiene que ver con el rendimiento a la hora de ejecutar lecturas y escrituras en el interior, permitiendo que en algunos casos pueden incluso sustituir a los discos fijos a la hora de ejecutar aplicaciones -no las más críticas en los profesionales-. Aparte, también dan mayores posibilidades a los dispositivos que piensan en estos accesorios como forma de almacenamiento único (a todos se nos vienen a la cabeza las videoconsolas e, incluso, algunos reproductores multimedia).
El caso es que la entidad que está detrás de la evolución de las tarjetas SD ha anunciado la sexta evolución de esta. La velocidad de trabajo que alcanza los 624 MB/s -superando los 312 MB/s de UHS-II- una marca más que respetable. Además, se sitúa a una distancia muy corta de los discos SSD como hemos comentado (que en modelos actuales superan los 800 MB/s, los de última generación se disparan pero no son estos con los que hay que establecer comparación).
Utilización de las nuevas tarjetas SD
Aparte de ser una opción para el uso como almacenamiento único en dispositivos que no son especialmente exigentes a la hora de trabajar con datos (donde incluso los portátiles de gama son una posibilidad, y también los Chromebooks como en alguna ocasión hemos comentado en Topes de Gama), de nuevo el segmento multimedia será uno de los grandes beneficiados, ya que se ganará mejoras prestaciones en todo tipo de cámaras. Así, por ejemplo, el trabajo con vídeo a mayor resolución que 4K será una opción completamente viable (incluso en formato microSD). Evidentemente, la ejecución de aplicaciones en teléfonos y juegos en estos y las consolas no faltarán -por muy exigentes que sean en el apartado gráfico-.
Por cierto, los nuevos modelos de tarjetas SD incluye una línea más de pines de contacto para conseguir las velocidades de transferencia de las que hablamos, por lo que los nuevos lectores podrán utilizar los accesorios que ahora mismo se utilizan, pero no al contrario (por lo tanto, la compatibilidad es limitada y esto puede ser un factor clave para que su implementación sea más lenta e, incluso, más amplia de lo que podría esperarse debido a su capacidad técnica). Esto es así en busca de no tener una mala latencia a la hora de realizar copias o lecturas de datos -incluso a la hora de trabajar de forma mixta con información en las tarjetas SD y en discos duros-.
El caso es que el salto evolutivo es claro en el nuevo estándar que se ha conocido para las tarjetas SD, en todos sus formatos, el aumento de prestaciones anuncia un futuro interesante para estas y su completa vigencia como elemento de almacenamiento. Pero, la verdad, es que su implementación no parece especialmente cercana y tiene algunos inconvenientes como hemos indicado. Pero con decisiones como la vista en la Nintendo Switch, está claro que para nada hay que dar por enterrado a este tipo de accesorios.