Los pagos a través del teléfono móvil continúan su expansión. Sin embargo, las tarjetas son aún un método de pago muy utilizado por los usuarios. Mastercard, pensando en la unión de ambos, en los avances tecnológicos ya piensa en una tecnología de huella dactilar para incluir a sus tarjetas de crédito. Tarjetas de crédito con lector de huellas dactilares en la parte inferior de la tarjeta que permitirá autorizar el pago a los usuarios con un toque, sin necesidad de una firma o marcar el código PIN.
Según explica Mastercard, la tarjeta funciona con cualquier lector de chip o de PIN y, por el momento, el modelo está siendo probado en Sudáfrica. Ya está lista la tecnología para integrarse en las tarjetas. Se planea, además, que en los próximos meses haya pruebas en otros países y que llegue el sistema llegue a los distintos mercados a finales de este 2017.
Tarjetas de crédito con lector de huellas dactilares
Un sistema de identificación que se basa en un escáner de huellas datilares en la esquina de la tarjeta. El escáner estaría en la esquina superior derecha de la tarjeta, en la parte que quedaría fuera del lector al introducir la tarjeta, al aire, con el fin de que el usuario pueda colocar su huella de manera fácil sin necesidad de PIN ni firma y de forma muy rápida. La tarjeta, además, según ha podido verse, no es más gruesa que una tarjeta normal ni más grande, sólo se diferencia de las actuales en el recuadro de la esquina donde introducir la huella.
Se trata de un sistema más seguro que el código PIN (cualquiera puede verlo cuando lo introduces en un terminal de pago) o que la firma (puede acabar falsificándose). Se podrá usar en cualquier sitio ya que el datafono de los comercios no deberá cambiarse ni actualizarse, servirá el mismo equipo para leer este tipo de tarjetas con huellas dactilares.
Para que funcione y poder usarlo, antes habrá que registrar nuestra huella dactilar. La huella dactilar se registrará en un “centro de inscripción” (que será, probablemente, una surcusal bancaria). Se escaneará, se encriptará y se transferirá a la tarjeta, que almacenará los datos para poder usarla desde ese momento. Se podrán almacenar hasta dos huellas diferentes siempre y cuando sean, como es lógico, de la misma persona. No se podrá a autorizar a nadie más a utilizar nuestra tarjeta de crédito.
Para utilizarlo, bastará con insertar la tarjeta y colocar el dedo sobre el recuadro. El sensor enviará la información al chip de la tarjeta y este, introducido en el terminal verificará la identidad. Si la identidad es correcta, el terminal indicará que ha sido autorizado y se realizará el pago de manera rápida, sin necesidad de perder tiempo firmando o arriesgándote a marcar mal un número del código PIN y teniendo que volver a empezar. Basta con colocar el dedo.