VPN, la forma de navegar por Internet de forma segura y con privacidad
La seguridad y privacidad es algo que en la actualidad es muy importante al navegador por Internet, ya que cada vez son más las acciones, incluso económicas, que se realizan dando uso a la Red. Para conseguir esto, una de las mejores opciones que existen es dar uso a conexiones VPN, que permiten establecer protocolos que aportan seguridad adicional que merece la pena valorar.
A grandes rasgos, lo que hace una aplicación VPN (Virtual Private Network), es enmascarar lo que haces en Internet de forma efectiva y sin un alto perjuicio en lo que tiene que ver con la velocidad de conexión. Por lo tanto, las grandes compañías no son capaces de seguir tu rastro de forma habitual, por lo que evitas ser espiado y nadie sabrá que es lo que hacen cuando estás navegando. Y, esto, en los tiempos que corren suena bastante bien.
Dos son los elementos principales que llevan al uso de una Red Privada Virtual que es el nombre completo que tiene en español. Por un lado, está la seguridad ya que incluso los hackers lo tienen mucho más complicado para dar contigo; y, adicionalmente, está la privacidad ya que al dar uso a una VPN tiene la posibilidad de elegir la ubicación del servicio desde el que se hace público que te conectas, independientemente del lugar real en el que estás (así, por ejemplo, puedes estar trabajando en París y simular que lo haces desde Madrid).
Cómo funciona una red VPN
Con clientes para todo tipo de dispositivos que se dan uso en condiciones de movilidad, como por ejemplo smartphones y ordenadores portátiles, y gracias a su uso los datos que pasan de forma prácticamente ilegible por la ISP que utilizas (operadora que te da acceso a Internet), dejan de estarlo. Al dar uso a una red VPN, se añade un paso adicional que se coloca justo antes de llegar al servidor de la compañía en cuestión y, por lo tanto, la información y ubicación real no se pueden conocer.
¿Y cómo se consigue esto? Pues mediante lo que se conoce como túnel de encriptado, algo que no ofrecen todos los clientes VPN, pero algunos que son de buena calidad como por ejemplo Surfshark sí que ofrecen. El caso, es que esta acción se realiza de forma directa entre el dispositivo del usuario y el servidor VPN, por lo antes de ejecutar la petición final para acceder a Internet todos los pasos para aumentar la seguridad se han completado. Incluso, también se ejecuta un cambio de dirección IP, ya que se da uso a la del servidor elegido para realizar la conexión en la aplicación utilizada, por lo que a la vez se oculta la real y, por extensión, la ubicación.
Este sería un resumen de cómo funciona en tiempo real una aplicación que permite dar uso a un servidor VPN:
- Conexión del dispositivo a una red VPN al ejecutar el cliente
- Acceso al servidor elegido y comienzo de la encriptación de los datos, además, se establece la configuración de cambio de dirección IP
- Salida de la información hacia el servidor del operador ISP del usuario con la protección ya activa
- El ISP realiza su función de forma habitual y resuelve la petición de información, como por ejemplo el abrir una página web. En ese momento se envía al servidor VPN todo para que los mande, todavía sin desencriptar, al dispositivo del usuario
- El ordenador, tablet o smartphone desencripta los datos utilizando la aplicación y ya se pueden utilizar sin restricciones
En definitiva, aunque dar uso a una red VPN agrega un paso adicional y que, en ocasiones y dependiendo de la aplicación utilizadas, puede añadir algo de retardo al acceder a las webs (por lo que es posible que a la hora de jugar lo mejor sea deshabilitar el uso) es de lo más recomendable dar uso de estos servicios debido a la seguridad y privacidad que aporta. Además, con el uso de estas herramientas también es posible saltarse las restricciones geográficas, por lo que incluso posible disfrutar de plataforma en streaming sin problemas independientemente del lugar del mundo en el que se está.
Aplicaciones VPN, ¿cuáles merecen la pena?
Pues lo cierto es que se ha mejorado mucho en los últimos tiempos en este tipo de software y, ahora, la sencillez es la nota predominante en ellos desarrollos que dan accesos a los servidores. Generalmente una vez que se accede a su interfaz, aparece un listado con los servidores que se utilizan y se recomienda el más eficiente (pero siempre es posible elegir cualquier otro). Se selecciona el deseado y se establece la conexión. Así de sencillo es todo, por lo que no hay pérdida.
Existen opciones gratuitas en el mercado, pero estas suelen tener restricciones importantes en muchas ocasiones, tanto en seguridad como en velocidad de conexión. Por eso, acceder a un cliente VPN de pago como Surfshark -que además es bastante económico para lo que ofrece y dispone de cliente para Android– es posiblemente la mejor solución para aumentar la seguridad y privacidad al navegar por Internet.