Lo cierto es que en el mercado de Android es complicado encontrar buenos productos vinculados al segmento tablet ya que pocos fabricantes apuestan claramente por la calidad y los precios altos cuando se trata de poner a la venta un nuevo dispositivo. Recordad que este tipo de dispositivos con el OS de Google cuentan con una poblada gama baja que distorsiona el potencial de productos como este Samsung Galaxy Tab S2.
De todos modos, Samsung no parece dispuesta a tirar la toalla y de ahí que la gama Galaxy Tab S2 sea una de las mejores que podemos encontrar actualmente en el mercado, aunque como ocurre con todos los productos de los coreanos, hay pequeños detalles que no acaban de pulir con las miras a crear, de verdad, un auténtico iPad killer que convenza a los usuarios de olvidarse del dispositivo de Apple.
Un diseño con altos y bajos
El Samsung Galaxy Tab S2 es un gran tablet que gana mucho más cuando lo cogemos y comprobamos lo versátil y manejable que es, que parece llamarnos para que lo usemos sin descanso, tanto dentro de casa como cuando salimos a la calle y tenemos un momento para consultar cualquier cosa. Ayuda a que percibamos esta sensación el buen trabajo de la compañía que ha dejado las medidas de este tablet en 23cm. de alto, 16 de ancho, unos insignificantes 5,6mm. de grosor y 392 gramos de peso.
El Samsung Galaxy Tab S2 cuenta con un frame metálico que le da cuerpo pero en la parte trasera encontramos plasticazo, un acabado que no parece estar a la altura de los últimos dispositivos de la casa que han cuidado mucho más el detalle de cada pieza que montan. De esta manera, tenemos un producto muy bueno al tacto pero que podría ser mejor y que, a pesar de sus medidas y manejabilidad, sigue dando la sensación de que estamos ante un móvil al que han agrandado.
Esta percepción no es nueva en esta gama y es hora de que los coreanos vayan buscando la forma de diseñar estos productos de otra forma ya que, además, existe un problema que este sí, es generalizado a este tipo de productos con Android: la falta de aplicaciones en la Play Store que exprimen las resoluciones de pantalla de dispositivos como este Samsung Galaxy Tab S2.
De todas formas, y dejando a un lado este detalle de su apariencia general, este tablet viene con una de esas incorporaciones de hardware que muchos usuarios van a valorar positivamente, como es la llegada a su frontal de un botón Home con funciones de lector de huellas, al estilo de lo que montan otros móviles de la casa como los Galaxy S6 y que, a diferencia de otras generaciones de Samsung, sí que es muy efectivo y funciona sin problemas aunque pongamos el dedo en la posición más inverosímil.
Por lo demás, tenemos un dispositivo muy compacto, con elementos de hardware muy cuidados que se perciben en el tacto de los botones de volumen y encendido/apagado, o en la cuna de la tarjeta SIM (para la versión con LTE) y microSD. Además, este Samsung Galaxy Tab S2 se carga a través de un cable microUSB por lo que no da, todavía, el salto al famoso USB Type-C que ya están adoptando muchas marcas del panorama Android.
Confianza total en Exynos
Como viene siendo habitual en muchos dispositivos de Samsung desde el año 2015, el procesador es obra de la propia compañía y su gama Exynos, que ofrece unos rendimientos extraordinarios y que en el caso de este Galaxy Tab S2 no va a ser una excepción. Así, este tablet lleva en su core un chip 5433 que ofrece un gran rendimiento y que se complementa de maravilla con los 3GB de memoria RAM que trae de serie. Eso sí, a la hora del almacenamiento tendremos dos configuraciones distintas de 32 y 64 gigas ampliables vía microSD.
Gracias a este procesador, el tablet es capaz de ofrecer un rendimiento muy bueno bajo cualquier circunstancia, ya estemos disfrutando de un juego, reproduciendo contenido multimedia o leyendo el correo y haciendo a la vez multitarea gracias a la ya conocida pantalla partida de Samsung. Eso sí, cuando todo parecía del color de rosa llegan los coreanos y se dejan olvidados dos componentes que, viendo el precio del dispositivo, tendrían que haber incorporado sí o sí: por un lado el chip NFC para utilizarlo con servicios como Samsung Pay, o la radio FM que, aunque en desuso, son todavía muchos los usuarios que la piden a los móviles (y tablets) que adquieren,
Android liviano, con Touchwiz
Tras haber tocado fondo con el Samsung Galaxy S4 en 2013, los coreanos aprendieron la lección y desde entonces han aligerado bastante las instalaciones de sus OS con Android, dejando a un lado bloatware innecesario y depurando su Touchwiz para que no interfiera en la rapidez del dispositivo. De esta forma, Android 5.0.2 Lollipop va como un tiro en este Samsung Galaxy Tab S2 y apenas tendremos que preocuparnos de estar tocando nada para que todo funcione correctamente.
Es más, algunas de las innovaciones de Samsung que son ya más que conocidas (multipantalla o reescalado de las ventanas de las apps) lucen de maravilla en este tablet ya que nos permitirá realizar más de una tarea a la vez y, lo mejor de todo, sin perder eficacia y rapidez para no ver ralentizado nuestro trabajo a todas horas.
Por si fuera poco, Samsung incluye de serie en el Galaxy Tab S2 la versión completa de Office 365 y un tiempo de suscripción de regalo que, eso sí, tendremos que encargarnos de pagar nosotros cuando expire. Un elemento que podría convencer a un usuario profesional de que este tablet es la solución para llevar siempre encima todos sus documentos de su trabajo.
Buena cámara, mejor pantalla
Estos son dos elementos que, cuando hablamos de Samsung, siempre brillan con luz propia. Por un lado está la pantalla, que tiene dos configuraciones distintas en este Galaxy Tab S2, 9,7 y 8 pulgadas que, además, mantienen una relación de aspecto 4:3, idéntica a la que tienen los iPad desde su estreno en el año 2010.
Por si eso fuera poco, estos paneles llegan con la extraordinaria tecnología super AMOLED de Samsung que tan buenos resultados da y a la que han añadido una resolución 2K (QHD) de 2.048×1.536 pixels que confieren al tablet una apariencia realmente buena. Premium podríamos decir donde los colores tienen una intensidad abrumadora y da gusto ver cualquier tipo de contenido multimedia en su pantalla que, por cierto, ocupa un 72 por ciento del frontal.
Si miramos a las cámaras encontramos dos de los sensores que los coreanos más han utilizado en los últimos tiempos y que ofrecen (sobre todo en la cámara principal) unos resultados realmente buenos. Y eso que solo tiene 8MP, pero es capaz de capturar imágenes con mucha nitidez, altos rangos dinámicos y que ofrece opción de HDR gracias a una app de Samsung que es la misma que podemos ver en muchos de sus smartphones. Eso sí, en situaciones de interior, noche o poca luz, no esperéis milagros. Sin embargo, cuando nos vamos a los selfies la cosa cae en picado ya que el sensor se queda en unos paupérrimos 2,1MP que dan para muy poco.
¿Y el vídeo? Bueno, pues una gran noticia: resolución 2K que nos permitirá ver los vídeos grabados a la resolución nativa del tablet sin perder un solo detalle. Cosa que valorarán positivamente aquellos usuarios que no se cortan en sacar en mitad de la calle estas 10 pulgadas para hacer fotos o lo que se tercie.
¡Ah!, y por último el precio… 499 euros para el Samsung Galaxy Tab S2 de 9,7 pulgadas sin LTE y 599 para el que sí cuenta con conectividad móvil.