¿Quién dijo que las reuniones eran aburridas? Si alguna vez has sufrido intentando escribir en una pizarra digital que no detecta bien el trazo o tarda una eternidad en cargar, la Samsung Flip Pro es justo lo que necesitas. Ágil, fluida y con un diseño que no desentona ni en una startup ni en un despacho corporativo, esta pantalla táctil es lo más parecido a tener un iPad gigante en la sala de reuniones.
La Samsung Flip Pro no es una simple pantalla interactiva: es una herramienta colaborativa pensada para transformar el trabajo en equipo, la enseñanza o las presentaciones profesionales. Con respuesta táctil ultrarrápida, escritura natural y conectividad total (HDMI, USB-C, WiFi, AirPlay…), lo tiene todo para brillar tanto en empresas como en aulas. Nosotros la hemos probado y te contamos por qué puede cambiar tu forma de comunicar ideas.
CARACTERÍSTICA | ESPECIFICACIÓN OFICIAL | OBSERVACIÓN EN NUESTRAS PRUEBAS / IMPACTO REAL |
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Pantalla Táctil y Latencia | LCD VA 65″, 4K UHD, Latencia 26ms, 20 puntos táctiles | La calidad de imagen 4K es excelente, con colores vivos y buenos ángulos de visión para una sala. La latencia de 26ms se traduce en una escritura y dibujo fluidos, sin retardo perceptible. |
Procesador y SO | Procesador [Especificar modelo si se conoce], Tizen OS | El sistema operativo Tizen es ágil y estable. Las aplicaciones integradas como la pizarra o el navegador cargan rápido. No experimentamos cuelgues ni ralentizaciones |
Conectividad Principal | HDMI (x2), USB-C (con carga 65W), USB-A (x3), WiFi 6, Bluetooth 5.2, AirPlay 2, Miracast, SmartView | La variedad de puertos es muy completa. El USB-C con carga de 65W es muy práctico para portátiles. La conexión WiFi 6 fue estable en todo momento. |
Lápiz y Accesorios | Lápiz pasivo (x2 incluidos), borrado con la palma | Los dos lápices incluidos (uno fino y otro más grueso) ofrecen una buena sensación de escritura. El reconocimiento de la palma para borrar es muy intuitivo y funciona bien. |
Diseño y tamaño: elegante, funcional y muy bien aprovechada
Si hay algo que Samsung hace bien, es lograr que sus dispositivos tecnológicos no desentonen en ningún entorno, y la Flip Pro es un claro ejemplo. A primera vista, parece más un mueble de diseño que una pantalla interactiva, con su marco blanco minimalista, esquinas redondeadas y soporte opcional con ruedas que le da un aire moderno y versátil.
Disponible en versiones de 55″, 65″, 75″ y hasta 85 pulgadas, puedes adaptarla a cualquier espacio: desde una sala pequeña de coworking hasta un auditorio educativo. Yo probé la de 65” y el tamaño me pareció perfecto para una presentación interactiva sin resultar intimidante.
El soporte de ruedas (se vende por separado, eso sí) es súper cómodo para moverla de sala en sala, ideal para centros educativos o espacios abiertos de trabajo. Y además se puede usar en vertical u horizontal, según el tipo de contenido o dinámica que necesites.
¿Lo mejor? Que no parece un panel tecnológico invasivo. Lo pongas donde lo pongas, queda bien. Y eso, en oficinas modernas donde cada detalle cuenta, se agradece.
Escritura fluida y precisión táctil: como escribir en papel, pero en 4K
He probado muchas pantallas táctiles en entornos educativos y corporativos, y casi siempre hay algo que chirría: retraso en la escritura, líneas que no siguen bien el trazo o latencia molesta. Con la Flip Pro, nada de eso ocurre.
Desde el primer segundo, la experiencia es ultrafluida. La respuesta táctil es inmediata, con una latencia de apenas 26 milisegundos, y detecta tanto el uso del dedo como del lápiz digital incluido. Puedes escribir, subrayar, dibujar o incluso borrar con la palma de la mano. Lo he probado en directo y es intuitivo a más no poder.
Además, admite hasta 20 puntos táctiles simultáneos, ideal para dinámicas de grupo o actividades colaborativas. Y todo esto en resolución 4K Ultra HD, lo que significa que cada trazo, color o anotación se ve con una nitidez impecable.
Es tan natural que acabas olvidando que estás escribiendo sobre una pantalla. Literalmente, es como usar una libreta, pero mucho más grande, brillante y colaborativa.
Conectividad total: enchúfalo todo y verás como funciona
Una de las claves de cualquier pantalla interactiva es que se entienda bien con tus dispositivos. En eso, la Flip Pro lo pone muy fácil: he conectado portátiles, tablets, móviles y pendrives sin pelearme con adaptadores ni menús confusos.
En el lateral y la parte trasera tienes una buena colección de puertos:
- HDMI (varios) para enviar vídeo desde casi cualquier fuente.
- USB-C con carga y vídeo, ideal para portátiles modernos.
- USB-A, RJ45, entrada de audio… ¡hasta WiFi y Bluetooth integrados!
- Compatible con AirPlay 2, Miracast y Samsung SmartView, así que puedes duplicar pantalla desde un iPhone, Android o PC sin cables.
En mi caso, probé la duplicación inalámbrica desde un Galaxy y un portátil Windows, y todo se conectó a la primera, con buena calidad y sin lag. Además, puedes dividir la pantalla fácilmente para mostrar múltiples fuentes a la vez. Una maravilla para reuniones o clases dinámicas.
Sistema operativo y funciones colaborativas: pensado para trabajar en equipo (sin estrés)
La Flip Pro no solo tiene buen diseño y conectividad, sino que además funciona con un sistema operativo rápido, estable y muy intuitivo. Samsung apuesta aquí por Tizen en una versión adaptada para pantallas profesionales, y la experiencia es fluida incluso con varios usuarios interactuando a la vez.
Desde la pantalla de inicio puedes:
- Crear pizarras desde cero con fondos personalizables
- Cargar documentos PDF, imágenes, PowerPoints o webs para anotarlos directamente
- Usar el navegador, apps preinstaladas o abrir presentaciones desde USB
- Grabar las sesiones y compartirlas por correo o guardarlas en red
Además, todo se guarda automáticamente y puedes exportar las sesiones a PDF para revisarlas más tarde. Probé a trabajar con varias personas a la vez, anotando ideas y organizando un pequeño mapa mental, y todo se hizo sin retrasos ni errores de sincronización.
¿Y lo mejor? Que se puede bloquear con PIN y controlar remotamente, lo que la hace perfecta para entornos de empresa o centros educativos que necesitan seguridad.
¿Merece la pena la Samsung Flip Pro? Valoración final
PROS (LO QUE MÁS NOS GUSTÓ Y POR QUÉ) | CONTRAS (LO QUE MENOS NOS GUSTÓ Y POR QUÉ) |
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✅ Escritura ultrafluida y natural: La latencia de 26ms (medida) realmente hace que se sienta como escribir en papel. Ideal para largas sesiones de brainstorming o clases interactivas. | ❌ Precio elevado, especialmente con accesorios: El modelo de 65″ parte de 1.199€, y el soporte con ruedas esencial suma unos 300€ más. Algunos competidores directos ofrecen soluciones algo más económicas. |
✅ Conectividad versátil y fiable: Múltiples puertos (USB-C con carga es un plus) y protocolos inalámbricos (AirPlay, Miracast) que funcionaron sin problemas con 5 dispositivos distintos en nuestras pruebas. | ❌ Sistema Tizen con tienda de apps limitada: Aunque fluido y estable para sus funciones principales, la disponibilidad de apps de terceros específicas para colaboración avanzada es menor que en plataformas Android/Windows. |
✅ Diseño elegante y funcional: Se integra bien en entornos profesionales y educativos. La posibilidad de usarla en vertical u horizontal es muy útil. | ❌ Ligero calentamiento perceptible: Tras más de 2 horas de uso continuo, la zona superior trasera de la pantalla se calentó notablemente al tacto, aunque no afectó al rendimiento durante nuestras pruebas. |
✅ Interfaz intuitiva y fácil de usar: Tanto la navegación por los menús como las funciones de pizarra son sencillas de aprender, incluso para usuarios no técnicos. La función de grabar sesiones es muy útil. | ❌ Calidad de sonido de los altavoces integrados solo correcta: Para presentaciones con audio o vídeos, recomendamos usar altavoces externos para una mejor experiencia, ya que los integrados (2x10W) son suficientes para voz pero justos para multimedia. |
Después de probarla en varios entornos —una presentación de equipo, una sesión de brainstorming y un taller formativo—, tengo claro que la Samsung Flip Pro es mucho más que una pizarra digital. Es una herramienta que hace que trabajar en equipo sea más intuitivo, más rápido y, por qué no decirlo, más divertido.
¿Para quién la recomiendo?
- Para empresas que hacen muchas reuniones y quieren dejar atrás las pizarras tradicionales.
- Para centros educativos que buscan una alternativa moderna e interactiva al típico proyector con pantalla.
- Para formadores o coachs que quieren algo visual, editable y profesional para sus sesiones.
¿Es cara? Sí, pero si piensas en todo lo que ofrece (fluidez, conectividad, seguridad, grabación y exportación de contenidos…), su precio tiene más sentido. No es un capricho, es una inversión en productividad.