Este agosto humo en el horizonte no cesa, con alertas en varios puntos del país y un calor que no da tregua. No vamos a alarmar a nadie, pero sí a ponernos prácticos: tener un kit contra incendios listo marca la diferencia. Aquí reunimos, con criterio y sin complicaciones, lo imprescindible para reaccionar bien si un día toca.
Nuestro planteamiento es sencillo y realista. Se trata de capacitarse con herramientas que cualquiera puede usar con seguridad. Hablamos de una manta ignífuga para la cocina, un extintor ABC doméstico (y otro más pequeño para el coche), guantes resistentes al calor, linterna fiable, detectores de humo bien ubicados y mascarillas FFP2/FFP3 por si la calidad del aire se complica. Te lo explicamos todo a continuación. Porque estar preparados no es opcional: es responsable.
Manta ignífuga FLASLD
Esta manta de fibra de vidrio de 1×1 m está pensada para sofocar conatos de fuego en la cocina (sartén/aceites), en pequeños aparatos eléctricos o en ropa que prende accidentalmente. Su función es cortar el oxígeno que alimenta las llamas; no ensucia ni deja residuos, y cualquiera en casa puede usarla con seguridad básica. La marca FLASLD la comercializa específicamente para hogar y cocina como “fire blanket” de emergencia.
Cómo se usa:
- 1) Cortamos la fuente de calor si es seguro hacerlo (apagar el fogón/hornillo). Nunca echamos agua sobre grasa ardiendo.
- 2) Tiramos de las pestañas y desplegamos la manta sujetándola delante de nosotros como “escudo” para proteger manos y antebrazos.
- 3) Cubrimos la llama de frente y desde arriba, sellando bien los bordes para ahogar el fuego; no movemos la sartén.
- 4) La dejamos puesta 20–30 min (mejor pecar de paciencia) para evitar reavivados. Si hay dudas, salimos, cerramos la puerta y llamamos al 112.
Si prende la ropa de alguien. La manta también sirve para envolver a la persona (mejor desde hombros hacia abajo, protegiendo cara y cuello) y apagar las llamas por sofocación; en paralelo, aplicamos la regla “pararse, tirarse al suelo y rodar”. Después, 112 y atención médica.
Dónde colocarla y mantenimiento. Recomendamos fijarla cerca de la salida de la cocina (no encima del fuego) y a una altura accesible. Conviene no reutilizarla tras un incendio y sustituirla si se daña el paquete o la tela. Un repaso rápido a cómo usarla con toda la familia, una vez al año, marca la diferencia.
Extintor de polvo ABC 2 kg
Un extintor ABC de 2 kg cubre los fuegos más comunes en casa y coche: A (sólidos como madera/papel), B (líquidos inflamables) y C (eléctricos). Es polivalente, compacto y con manómetro para comprobar de un vistazo que está en zona verde. Suele venir con soporte para pared o vehículo, lo que facilita tenerlo visible y accesible.
Cómo se usa (método PASS, 4 pasos):
- Tirar del pasador.
- Apuntar a la base del fuego (no a las llamas).
- Presionar la maneta.
- Barrer lateralmente hasta sofocar. Siempre con vía de escape despejada y solo ante conatos; si crece o hay duda, nos retiramos y llamamos al 112.
Recomendamos montarlo en el paso de salida de la cocina (nunca encima de la placa), en el garaje y/o en el pasillo cercano a estancias “calientes”; en coche, fijado con su soporte y a mano en el maletero o zona de carga. La normativa profesional exige distancias máximas a extintor en edificios; en casa nos guiamos por el acceso rápido y visible.
Mantenimiento que no podemos olvidar.
- Mensual/Trimestral (usuario): mirar manómetro (en verde) y estado del precinto/boquilla.
- Anual: revisión por empresa mantenedora acreditada.
- Cada 5 años: retimbrado/prueba hidráulica. Si se usa, se recarga o sustituye. Estas pautas siguen el RIPCI (RD 513/2017) y guías técnicas.
Guantes ignífugos MYSAFETY
Guantes de cuero para soldadura, pensados para proteger frente a calor de contacto, chispas y pequeñas salpicaduras, por eso nos encajan tanto para barbacoa, horno, chimenea o estufa además de bricolaje. Entran en el kit porque nos permiten actuar con seguridad cuando tenemos que mover una sartén caliente, retirar una bandeja o acercarnos a un conato con la manta o el extintor.
Por qué los incluimos.
- Aportan una barrera rápida para manipular metal/utensilios calientes sin quemaduras.
- Complementan a manta ignífuga y extintor: más seguridad al tapar una sartén o cerrar una llave de paso.
- Son multiuso en casa y exterior (parrilla, leña, horno), así que no se quedan en un cajón.
Linterna de emergencia PRUNUS
Linterna compacta con manivela y panel solar que asegura luz aunque no haya corriente ni pilas. El mosquetón permite llevarla colgada en la mochila, el coche o junto a la puerta de casa. Perfecta para apagones, camping y como parte del kit antiincendios.
Por qué la incluimos.
- Independencia energética: funciona sin pilas ni enchufe.
- Siempre lista: un minuto de manivela puede darnos luz útil para actuar con seguridad.
- Ultraportátil: ligera, resistente y pensada para uso real en emergencias.
Y para que siempre funcione, una vez al mes, le damos manivela un par de minutos y comprobamos que enciende correctamente; así nos aseguramos de que estará lista cuando haga falta.
Detector de humo
Este detector de humo doméstico con alarma de 85 dB, función de silenciamiento (hush) para falsas alarmas y aviso de batería baja. Usa batería CR123A reemplazable y declara hasta 10 años de vida útil del equipo, así que cubre con solvencia la prevención básica en casa.
Declara hasta 10 años de vida útil y entra en el kit por pura eficacia: ofrece alerta temprana para ganar minutos, evacuar y llamar al 112. Se instala sin taladros en dos pasos —adherimos el soporte al techo o pared lisa, encajamos el detector y pulsamos TEST— y se mantiene con un test mensual, limpieza ligera del polvo y uso del silenciamiento (hush) cuando salte por vapor o humo leve; cuando avise de batería baja, la cambiamos y, al cumplir su vida útil, sustituimos el equipo completo. Recomendamos colocarlo en pasillos y dormitorios, en el techo, centrado y a más de 30 cm de las paredes, evitando cocina y baño para reducir falsas alarmas; si queremos cobertura en la cocina, mejor optar por detector de calor.
Mascarilla FFP3
Acabamos con mascarillas FFP3 (homologadas CE) con filtración >99% frente a partículas en suspensión cuando el ajuste es correcto. Y sí, las aprendimos a usar con la COVID pero en episodios de humo de incendios y polvo fino son incluso más importantes para reducir lo que respiramos en interiores, en el coche o al salir puntualmente a la calle.
Por qué las incluimos en el kit.
- Alta filtración de partículas finas (FFP3) frente a humo y ceniza en suspensión.
- Sin válvula: mejor en espacios compartidos e interiores.
- Envase individual (20 uds.): higiene y reserva para varios días de mala calidad del aire.
Y esto es importante: lo guardamos todo en un sitio bastante accesible accesible (cocina, salida y coche), pegamos instrucciones visibles y hacemos un mini simulacro familiar de 3 minutos. No te olvides tampoco de una revisión rápida cada trimestre: manómetro en verde, pilas al día y caducidades controladas. Si un día toca, sabremos qué hacer. Mejor tenerlo y no usarlo que necesitarlo y no tenerlo.
