Los portátiles convertibles, o también conocidos como 2 en 1, son los que tienen la pantalla táctil para hacer más fácil su uso. Sin embargo, aunque son más llamativos, no siempre son la mejor opción. Te ayudamos a saber si realmente es una buena idea comprar un ordenador de este tipo.
Nuestros hábitos tecnológicos están cambiando. Cada vez somos más los que deslizamos el dedo por el móvil y la tablet, incluso desde bien pequeños. En algunas situaciones, como cuando estás tirado en el sofá, un portátil con pantalla táctil podría ser todo lo que necesitas. Si tienes curiosidad por un portátil 2 en 1 pero no estás seguro, hay ciertas cosas que debes considerar antes de comprarlo.
Usos de los portátiles con pantalla táctil
Antes de decidirte por la compra, debes analizar el uso que le vas a dar. Lo principal es que elijas uno que se ajuste a tu presupuesto y que sea ideal para el uso que le vas a dar a diario. No pienses en el uso ocasional porque estarás malgastando el dinero.
Los portátiles con pantalla táctil suelen costar más y pueden ser más pesados que los tradicionales. Si realmente ibas a buscar un modelo así por capricho, quizá te convenga invertir ese dinero en más capacidad de RAM o funciones más inteligentes. No obstante, hay quienes ese coste adicional les merece la pena si quieren dibujar o tomar notas directamente en la pantalla. Pero también debes pensar que no es necesario un ordenador convertible para eso, ya que una tablet como el iPad es más que suficiente.
Si normalmente usas un portátil en un escritorio, es muy probable que no te beneficie tener una pantalla táctil. En cambio, si eres de los que usa el ordenador mientras estás tirado en el sofá o la cama, entonces es una interesante apuesta. No estarás lejos de la pantalla y podrás tocarla con los dedos para pasar a la siguiente noticia o pulsar sobre enlaces de YouTube. Además, ocurre algo muy curioso cuando alguien se decanta por estos portátiles. Lo normal es que se adapten tanto, y tan rápido, que ya no quieran volver a usar los de pantalla normal.
No todas las webs permiten usar los dedos
Sin embargo, no todo es positivo. Aunque des por hecho que podrás usar los dedos como un ratón, lo cierto es que hay muchas webs y programas diseñados para usarse exclusivamente con el touchpad o el ratón. Sabemos que puede ser frustrante si quieres editar fotos o rellenar un pdf tocando solo la pantalla táctil, pero es el gran inconveniente que tienen este tipo de ordenadores. Las desventajas de tener contacto solo con los dedos es que la interacción puede cambiar dependiendo de la aplicación o programa que usemos.
Además, si eres algo quisquilloso con las manchas en la pantalla, este tipo de ordenadores suelen tenerlas más brillantes que las de los móviles, por lo que verás mucho más las marcas de huellas y otro tipo de suciedades. Así que tendrás que limpiarla mucho más que una pantalla normal de ordenador. Será similar al mantenimiento de una tablet.
La batería se consume antes
Algo que no te cuentan tampoco es que la duración de la batería puede ser un factor a tener en cuenta antes de comprarlo. La pantalla táctil suele tener un mayor consumo porque necesita detectar el toque de tus dedos y las interacciones táctiles. Así que es normal que se reduzca la autonomía en comparación con un portátil tradicional.
Hay que tener en cuenta que suelen tener retroiluminación, que es uno de los mayores consumos de energía. Y, por supuesto, cuando se usa de forma táctil, la retroiluminación sigue activa. Además, estas pantallas también tienen una alta resolución y brillo, por lo que si trabajas con él es probable que se acorte la duración de la batería.
¿Deberías comprar un portátil convertible?
Las ventajas de estos portátiles con pantalla táctil es que son perfectos para artistas, diseñadores gráficos, editores de vídeo, estudiantes o arquitectos. Al tener una pantalla brillante y con colores nítidos, se asemejan mucho con una pizarra digital. De hecho, el Surface de Microsoft se ha convertido en un top ventas por ser uno de los más potentes en este tipo de funciones.
Este tipo de ordenadores suelen recomendarse para hacer trabajos relacionados con los estudios. Puedes tomar apuntes o dibujar gráficos de forma más fácil que con una pantalla normal. Y, aunque tienen un diseño bonito, debes pensar si le vas a dar este tipo de uso. Si tan solo quieres probar la pantalla táctil, lo mejor es que optes por uno estándar para que sea compatible con un mayor número de aplicaciones y webs.