Ahorra haciendo tus propias cápsulas con café molido para tu cafetera Nespresso

¿Tienes una cafetera de cápsulas y quieres probar nuevas modalidades de café? En ese caso, sigue leyendo, porque te vamos a enseñar cómo usar café molido en cafeteras de cápsulas.
En muchas ocasiones, hay quien rechaza de lleno hacerse con una cafetera de cápsulas por el coste que estas conllevan a largo plazo. Y es que es innegable que las cápsulas son más caras que el café en grano. Pero, claro, son rápidas, fáciles de utilizar y nos permiten tener un café listo en apenas unos segundos.
¿Y si te decimos que puedes usar el café molido, pese a que te hayas hecho con una cafetera de cápsulas? Es barato, fácil y solo tendrás que hacerte con un molinillo de café y unas cápsulas reutilizables.
Cómo usar café molido en cafeteras de cápsulas
Comencemos con lo más básico: ¿qué necesitamos? Lo primero que debes averiguar es qué cápsulas utiliza tu cafetera, puesto que no todas usan las mismas. Y tendrás que hacerte sí o sí con cápsulas reutilizables, puesto que estas serán cruciales.
- Para cafeteras Nespresso, estas cápsulas que os dejamos aquí son la mejor alternativa. Viene un pack de cinco, son reutilizables y se adapta a todas las cafeteras que hayan salido al mercado en la última década. Eso sí, tienen un máximo de usos: 30 por cápsula. Así que tendrás que ir renovándolas de vez en cuando.
- En el caso de que tengas una cafetera Dolce Gusto, te dejamos aquí una cápsula reutilizable. En este caso, viene con un pack completo para que puedas limpiarla y, de esta manera, usarla todas las veces que desees.
Tras las cápsulas, solo tendrás que hacerte con un molinillo de café. Hay dos tipos: manuales o eléctricos. Si bien es cierto que los manuales tienen algo de magia, por el hecho de permitirte hacerlo de la forma más tradicional, los eléctricos son mucho más cómodos. ¡Aunque de ti depende! Nosotros te damos las dos alternativas, para que escojas el que prefieras.
Si prefieres uno manual, este de la marca CONQUECO es uno de los más famosos ahora mismo. Es regulable, compacto, fácil de usar y te lo podrás llevar a cualquier parte. Y, en caso de que prefieras uno eléctrico, este de La Moustache es una gran alternativa. Porque los resultados que ofrece son extraordinarios, ¡y es muy barato!
El procedimiento es sencillo:
- Eliges la variedad de café en grano que prefieras, entre todos los tipos que hay en el mercado.
- Procedes a molerlo en tu molinillo nuevo, dejándolo justo con la textura adecuada para tu cafetera de cápsulas.
- Introduces el café molido en las cápsulas. Y, en caso de que te sobre, siempre podrás preservarlo en buenas condiciones para sacarle más partido más adelante.
Ventajas del café en grano frente a las cápsulas
Puede que te preguntes si realmente merece la pena pasar por todo este proceso. Lo cierto es que sí, si tenemos en cuenta el ahorro económico que vas a notar a largo plazo. El café en cápsulas es mucho más caro que el café en grano, y eso hará que ahorres mucho día a día. Además, no tienes por qué moler cada día el café (aunque el resultado así es mejor), siempre y cuando almacenes ese café molido en buenas condiciones.
A esto hay que añadirle que, gracias a las cápsulas reutilizables, conseguirás ser mucho más sostenible con el medioambiente. ¡Y contaminarás mucho menos! Esta es otra ventaja que hemos de tener en cuenta si realmente nos preocupamos por el mundo que nos rodea. El usar café molido en una cafetera de cápsulas ahora será una alternativa más a la que podrás sacarle partido siempre que desees.