Contraseñas seguras, un elemento clave para estar protegido en Internet
Internet se ha confirmado como una gran opción para aprovechar servicios de forma sencilla y desde cualquier lugar. Un ejemplo es el acceder al correo electrónico o a servicios de almacenamiento en la nube donde se guardan diferentes archivos, que pueden ir desde fotografías hasta documentos de texto. Por lo tanto, es una gran idea utilizar contraseñas seguras para prevenir accesos no deseados a los datos.
Son muchos los factores que influyen a la hora de estar seguro al navegar por Internet, como por ejemplo el uso de un router que incluya grandes opciones de protección. Pero, sin duda alguna, el uso de cadenas de caracteres que ofrezcan una seguridad alta es esencial para proteger la información que se utiliza de modo online que cada vez es mayor. Y, por desgracia, pese a las noticias que se conocen respecto a filtraciones y la baja protección que consiguen los usuarios al utilizar contraseñas repetitivas o predecibles, el panorama de uso –al menos en España- no ha cambiado mucho en los últimos tiempos a la hora de utilizar contraseñas seguras.
Algunos de los fallos más comunes que se suelen cometer a la hora de establecer una contraseña en sus servicios online son el uso de la misma opción en varios lugares; dar uso a palabras o cadenas de caracteres que tiene que ver con la información personal (un ejemplo es el mes de nacimiento o el nombre de la mascota); uso poco habitual de caracteres especiales, como por ejemplo la almohadilla e incluso los números no son una mala opción; y, además, no se procede a un cambio de contraseña pasado un tiempo para evitar que las filtraciones desconocidas afecten a los datos a los que se accede desde la plataforma en cuestión. Todos estos son fallos que se pueden solucionar de forma sencilla y lo cierto es que el nivel de protección se eleva de forma considerable.
Consejos para crear una contraseña segura
Aunque parezca mentira, no es especialmente complicado crear una contraseña segura –o varias- para darle uso en diferentes servicios en Internet. Basta con seguir algunas recomendaciones para que en cuestión de pocos minutos se tenga una buen listado que permite estar tranquilo respecto a que no será especialmente sencillo dar con todos los caracteres que componen la palabra de seguridad y que se utiliza de pasarela para acceder a datos y opciones que son importantes y secretas tanto en el ámbito personal como en el profesional.
Estos son algunos consejos de creación que creemos que son importantes seguir para lograr una contraseña que no tenga resquicios en lo referente a la seguridad:
- Utiliza siempre una combinación de letras –incluidas mayúsculas- y números. A ser posible, no debe faltar algún símbolo como por ejemplo el del dólar o la arroba
- El mínimo de caracteres que debería tener una buena contraseña es de diez, por lo que es recomendable que se junten dos o más palabras –sin espacios- que formen la contraseña
- No dar uso a palabras comunes, aunque sean en otro idioma, a la hora de generar una contraseña. Estas son las primeras que son probadas por los hackers.
Un ejemplo de creación y que se puede tomar como referencia es el elegir una frase de algo que recordemos de forma concreta, por ejemplo “El año de nacimiento de mi padre fue 1934 en el mes de junio” y, utilizar la primera letra de cada palabra. En este ejemplo la contraseña sería la siguiente: “Eadndmpf1934elmdj”. Completa y difícil de descifrar, ¿verdad?
Y, recuerda, cambia de forma periódica la contraseña que utilizas en los diferentes servicios ya que de esta forma estarás mucho más seguro para que no te veas afectado por los robos de contraseñas… independientemente que se conozcan o no.