He probado la freidora de aire Cecotec Cecofry de 5,5 L de capacidad y ahora es la que recomiendo a todos mis amigos
Uno de los accesorios que se han convertido en imprescindibles en muchas cocinas son las freidoras de aire. Están de moda… ¡y no es para menos! Gracias a ellas tenemos un sistema de cocinado mucho más rápido y eficiente que en horno o sartén. Y si añadimos a la ecuación el hecho de que vamos a usar mucha menos cantidad de aceite, tenemos una opción más saludable con la que no renunciamos al sabor. He tenido la ocasión de probar una de las más vendidas del mercado, y hoy te cuento por qué tú también deberías hacerte con ella.
Cuando se trata de freidoras de aire muchos son los modelos que se nos vienen a la cabeza. Pero si quieres ir a tiro fijo, en este artículo te voy a contar todo acerca de la freidora Cecotec Cecofry, con una capacidad de 5,5 litros y una potencia de 1700 W.
Además, se trata de una opción bastante económica, pues su precio habitual oscila los 70 euros. Por lo que si nunca has tenido un electrodoméstico de este tipo, acceder a ellos a este coste es una muy buena idea además de una apuesta mucho menos arriesgada. ¿Quieres conocer todo acerca de esta freidora? A continuación te lo cuento todo.
Doce programas de cocción y una interfaz sencilla
Soy un cocinillas. Y a pesar de ser periodista –y autónomo– intento llevar un estilo de vida lo más ordenado que puedo. De verdad que lo intento. Y sé que uno de los elementos que no me pueden fallar es la dieta. No quiero renunciar al sabor de la comida, pero a la vez no quiero consumir grasas en exceso y quiero que todo se haga de manera fácil.
Por eso, gracias a los 12 modos de cocción predeterminados que incluye este modelo, para mí cocinar es un acto sencillo y que puedo resumir en tres pasos: abrir cajón, meter comida, pulsar botón. Su potencia de 1700 W y sus 200 grados Célsius de temperatura me permiten preparar platos en poco tiempo. Y en el caso de que quiera un acabado diferente, siempre puedo manejar los controles desde el panel táctil que incluye.
Sin embargo, también he de reconocer que el pecado de la pereza se me aplica a la hora de lavar los platos. Por eso, cuando he de limpiar el cajón de la freidora, mi truco es siempre utilizar papel de horno en la base, Y créeme que noto un cambio enrome cuando la tengo que poner a punto para el siguiente servicio.
Gracias al recubrimiento antiadhernte de la base puedo dejar el cajón en remojo y, con tan sólo unos pasos de esponja y jabón, queda todo limpio y reluciente. ¡Es muy sencilla de limpiar! Pero también el secado se hace en un santiamén, ya que cuando le paso el trapo y pongo a precalentar, está lista en muy poco tiempo para volver a cocinar.
Además, también suelo tener reuniones de amigos en casa. Y, adivinad quién cocina. Exacto, el mismo que escribe estas líneas. Por eso me gusta que tenga un depósito de 5,5 litros de capacidad, ya que puedo preparar más raciones de una sola sentada. Y por un precio de menos de 70 euros, me sorprende gratamente todo lo que es capaz de ofrecer: potencia, rendimiento, sencillez y, sobre todo, con fiabilidad y sin complicaciones.
