¿No sabes qué debes buscar en una nevera portátil para conseguir que esta tenga buena calidad? En ese caso, sigue leyendo, porque tenemos la guía de compra definitiva.
Llega el verano, el buen tiempo… ¡Y no tenemos una nevera portátil para ir a la playa! O queremos irnos de camping, y no disponemos de una nevera eléctrica que nos permita mantener frescas nuestras bebidas o nuestra comida. Si estás justo en esa situación, ha llegado el momento de lanzarte a por una nevera portátil.
Pero, claro… ¿Cómo podemos saber si esa nevera en concreto es buena o no? ¿En qué tenemos que fijarnos? Es importante saber qué características hay que revisar antes de comprar una para acertar sí o sí. Justo en eso queremos echarte hoy una mano con esta guía de compra. ¡Serás un experto en neveras!
Qué debe tener la mejor nevera portátil
¡Veamos qué debe tener una nevera portátil para ser una buena alternativa! Lo primero que debes plantearte, antes que cualquier otra cosa, es para qué la vas a usar. Porque de esto va a depender que una opción concreta sea interesante para ti o no.
Si la quieres para ir a trabajar, por ejemplo, deberías priorizar que fuese pequeña y fácil de transportar. Quizá quieras que tenga asas que te resulten cómodas, o que se pueda plegar y guardar cuando hayas terminado de usarla.
No obstante, si es para ir a la piscina o a la playa, quizá busques algo más grande. Las que son robustas son muy cómodas, porque te garantizarán que los alimentos y bebidas estén totalmente protegidos de los golpes. Mas las que están hechas de tela suelen tener compartimentos, algo que puede venir bien si lo que buscas es tenerlo todo lo mejor organizado posible.
Eso sí, todas las opciones que hemos visto hasta ahora requieren tener hielo para que los alimentos o las bebidas se encuentren frescos el mayor tiempo posible. Y eso puede ser una molestia si quieres poner la nevera portátil en una autocaravana, por ejemplo. En esos casos, lo mejor es optar por una nevera eléctrica. Necesitarás una conexión eléctrica, pero lo habitual es que cuando vayas de acampada o con caravana siempre tengas un enchufe a mano. A cambio, ofrecen mucho espacio y una temperatura estable durante más tiempo.
Así pues, lo primero que debes tener claro es para qué quieres la nevera portátil. Y, una vez que sepas esto, pasamos a ver todos esos parámetros que debes tener en cuenta.
Tipos de neveras portátiles
Hay diferentes tipos de neveras portátiles. Las más conocidas son las que necesitan de hielo para preservar una temperatura fresca durante más tiempo. Dentro de este tipo, debemos diferenciar necesariamente entre las que son duras y las que están hechas de tela. Estas primeras tienen la ventaja de proteger todo lo que haya en su interior, pero las segundas suelen ser más cómodas de transportar. Dependiendo de la ocasión, puede ser mejor optar por una u otra.
Por otro lado, tenemos las neveras portátiles eléctricas. A estas les hemos querido dedicar un apartado especial, que encontrarás algo más abajo, porque son más complejas. No son una opción para ir a la playa o a la piscina, pero son perfectas para viajar con autocaravana o para hacer acampada cuando se tiene electricidad. Y es que son las que mejor mantienen la temperatura. Además, no necesitan de hielo, con lo cual también te permiten disponer de más espacio en su interior.
En este sentido, nosotros lo tenemos bastante claro: lo mejor es optar por una nevera tradicional cuando necesites movilidad, y por una eléctrica cuando estés en un sitio más o menos fijo.
Peso, tamaño y capacidad
Si te decides por una nevera portátil de hielo, debes tener en cuenta tanto el peso en sí del producto como el tamaño, además de la capacidad. Cuando lo que buscas es la máxima versatilidad a la hora de viajar, ya sea porque la vas a usar para trabajar o porque no vas a llevar demasiado dentro, lo mejor es elegir una pequeña. ¡Y de tela! Porque son mucho más fáciles de llevar a cualquier parte.
No obstante, puede que necesites que tenga mucha capacidad para almacenar muchas bebidas. En ese caso, tendrás que ver los litros que permite almacenar esa nevera en concreto. A partir de 15 litros, podrás considerarla entre mediana y grande. Las hay incluso de 48 litros, que son casi mini neveras por la cabida que ofrecen.
Detalles extra
Más allá de los detalles que ya hemos visto, debes analizar unos cuantos parámetros para ver si la nevera encaja contigo.
- El material es clave, puesto que es lo que hará que la nevera sea dura o blanda. Además, te asegurará más o menos resistencia, dependiendo del tipo de material y de la calidad de este.
- Si quieres viajar de la forma más cómoda, lo mejor es que tenga asas para que la puedas llevar como si de una mochila se tratara. En caso de que optes por una nevera dura, bastará con que tenga un enganche para que puedas viajar con ella.
- Hay algunas que traen consigo compartimentos en su interior, y son todo un acierto a la hora de mantenerlo todo ordenado.
- Si optas por una que sea muy pesada, quizá te interesaría que tuviera ruedas para que la puedas mover con relativa facilidad.
Las neveras portátiles eléctricas
Pasamos ahora a hablar de las neveras portátiles eléctricas, que si bien comparten ciertas características con las que hemos visto hasta ahora, tienen sus peculiaridades. La principal es que requieren estar enchufadas a la corriente para mantener la temperatura. No siempre tendrás que usar enchufes, porque en ocasiones puedes hacer uso de una batería específica, pero debes tenerlo en cuenta.
Eso sí, tienen muchas ventajas. Como que son bastante más grandes que las anteriores y, por tanto, tienen más capacidad. O que no pierdes espacio interior con el hielo, algo que también es importante. Además, son muy versátiles, porque puedes incluso usarlas en el jardín para cuando tengas visita.
Son perfectas si lo que buscas es enfriar rápidamente bebidas, por ejemplo. Pero, claro, pueden llegar a hacer ruido debido al compresor y necesitan siempre conexión.
Hay ciertos parámetros que son exclusivos de este tipo de neveras, más allá de todos los que hemos mencionado como genéricos:
- Tipo de alimentación: al estar diseñadas para que puedas utilizarlas tanto en casa como en una autocaravana, suelen contar con dos tomas diferentes. La primera, de 12 V, para vehículos, y una segunda, de 220 V, para viviendas. Lo ideal es que cuente con ambas tomas, para así ofrecernos esa versatilidad.
- Ruedas: como pesan mucho, no es raro encontrar que traen consigo ruedas para que las puedas mover fácilmente.
- Capacidad de enfriamiento: aparecerá indicado en las especificaciones del producto como la temperatura mínima que puede alcanzar la nevera. Es más, hay algunos dispositivos que te señalan incluso cuántos kg congelan en 24 horas.
- Consumo eléctrico: al ir conectadas a la corriente, implican un gasto energético. No obstante, no es algo vital, a menos que tengas intención de dejarla conectada todos los días en tu hogar.
- ¿Función de calentar? Curiosamente, hay algunos modelos que no solo son capaces de mantener bebidas frías, ¡sino también calientes! No son los más habituales, y su precio suele ser algo superior.
Un último consejo antes de comprar tu nevera portátil
A estas alturas ya tendrás claro que no hay una única mejor nevera portátil, sino que todo dependerá de tus planes, tu entorno y tu ritmo de vida. Porque no es lo mismo buscar algo pequeño para llevar la comida al trabajo que una nevera XXL para un finde de camping con los amigos. Ni tampoco es igual una escapada a la playa de un día que un viaje de diez días por carretera.
Antes de lanzarte a comprar, te animamos a que pienses en lo siguiente: ¿la vas a mover mucho? Entonces prioriza ligereza y asas cómodas. ¿La vas a enchufar en el coche o en una caravana? En ese caso, revisa bien que tenga doble toma de corriente. ¿Vas a llenarla con hielo o prefieres olvidarte de él? Aquí entran en juego las eléctricas frente a las tradicionales.
Y si dudas entre dos modelos, recuerda que muchas veces lo que marca la diferencia son los pequeños detalles: un compartimento extra, una tapa hermética o un par de ruedas pueden hacerte la vida más fácil cuando estés a pleno sol, con todo el maletero lleno y la bebida aún sin enfriar. Así que elige bien… ¡y prepárate para disfrutar del verano como se merece!
Teniendo en cuenta todo esto, ¡te será mucho más fácil escoger la nevera perfecta!