En los últimos meses, se ha convertido en uno de esos productos que desaparecen de las estanterías de LIDL antes siquiera de que termines de pensártelo. Y no es para menos. La vaporeta Polti que comercializa la cadena alemana reúne tres de las cualidades más buscadas por los usuarios: buena potencia, ligereza y facilidad de uso. Pero, ¿realmente está a la altura de tanta expectación? En este análisis la hemos puesto a prueba a fondo y esto es lo que hemos descubierto.
La limpieza a vapor ha ganado terreno frente a otros métodos tradicionales gracias a su eficacia y al hecho de que no necesitas productos químicos para obtener un resultado impecable. En este contexto, Polti lleva años consolidándose como una marca de referencia en vaporetas tanto a nivel doméstico como semi-profesional, y su modelo distribuido por LIDL llega con la promesa de un rendimiento sobresaliente por un precio asequible.
Características principales
Diseño y primeras impresiones
Cuando sacamos esta vaporeta de la caja, lo primero que notamos es su diseño compacto y manejable. Es más ligera de lo esperado, algo fundamental si piensas utilizarla en cristales, juntas del baño o sobre textiles como sofás o colchones. El mango se adapta bien a la mano, los materiales no parecen endebles y, sobre todo, el uso es muy intuitivo. En pocos minutos está lista para usarse gracias a su rápido calentamiento, que ronda los tres minutos. No necesitas ningún manual: llenar el depósito, enchufar y empezar.
Limpieza a vapor: eficaz y sin esfuerzo
La presión de vapor de 3,5 bares nos ha sorprendido muy gratamente. Hemos podido desincrustar la suciedad de las juntas de los azulejos, limpiar las puertas del horno, eliminar restos de grasa de la campana extractora y darle un buen repaso al interior del coche. Aunque el depósito no es el más grande del mercado, ofrece entre 15 y 20 minutos de uso continuo, lo suficiente para limpiezas rápidas y localizadas. Y lo más importante: sin necesidad de detergentes ni productos químicos.
El caudal de vapor es más que aceptable para un modelo doméstico. El disparo de vapor es directo y concentrado, y si bien no sustituye a una limpieza industrial, sí que deja sensación de limpieza profunda. En superficies textiles funciona especialmente bien para desinfectar sin mojar demasiado, ideal para hogares con bebés o mascotas.
Accesorios útiles y versatilidad sorprendente
El kit de accesorios que incluye es más completo de lo que cabría esperar en su gama. Nos ha resultado especialmente útil la boquilla concentradora para rincones estrechos y el cepillo redondo para zonas con suciedad más persistente. También incluye un rascador para vitrocerámicas y cristales que rinde de forma excelente, sin dejar rayones ni marcas.
Eso sí, si tu intención es limpiar varias habitaciones del tirón, ten en cuenta que tendrás que parar y recargar el depósito. No es un fallo, es una consecuencia de su diseño compacto. Para limpiezas intensas, lo recomendable sería un modelo con mayor capacidad como los de Kärcher o Cecotec, aunque todo depende del modelo que elijas.
Lo mejor y lo peor
Lo mejor de esta vaporeta es su relación calidad-precio. Cuesta poco, pesa poco y limpia mucho. La ligereza y el diseño compacto la hacen perfecta para el uso doméstico. Además, se calienta rápido y está lista en menos de lo que tarda la cafetera en prepararte el desayuno. Si añadimos su versatilidad y facilidad de uso, el conjunto es más que redondo para la mayoría de usuarios.
Lo peor, sin embargo, es el tiempo limitado de uso por carga y el cable de corriente algo corto, que en algunas estancias exige usar una alargadera. También sería interesante que contara con un sistema de vapor continuo sin necesidad de mantener el botón pulsado. Pero son detalles menores si tenemos en cuenta todo lo que ofrece por su precio.
¿La recomendamos?
Sí, sin ninguna duda. La vaporeta Polti de LIDL es una de esas compras que sorprenden para bien. No pretende competir con modelos industriales, pero para la limpieza cotidiana del hogar es una de las mejores alternativas del mercado. Ya sea para limpiar el baño, dar un repaso al coche o higienizar colchones y tejidos, cumple con creces. Y además, lo hace sin usar ni una gota de productos químicos. Eso sí, si ves una en tu LIDL más cercano, no te lo pienses mucho porque vuelan.