¿Acabas de hacerte con un nuevo ordenador gaming o estás montándote uno y quieres sacarle todo el partido posible a tus nuevos componentes de última generación? El monitor es una pieza básica de cualquier setup que a menudo se valora menos de lo que merece: hoy venimos a analizarte en profundidad uno de los monitores de gama más alta del momento. ¿Vale la pena invertir en él?
Se trata del ASUS ROG Strix OLED XG27AQDMG, al que a partir de ahora nos referiremos como XG27 para no volver loco al posible lector que llegue y vea tal galimatías de letras y números.
Se trata de un monitor de gama alta, pero que podemos llegar a encontrar alrededor de los 600 € cuando hay buenas promociones, un precio que no se aleja tanto del de los monitores de calidad de gama media.
Pero dejémonos de introducciones y vamos con lo importante.
ASUS ROG Strix OLED XG27: ficha técnica y características
| Diagonal de pantalla | 26.5 pulgadas |
|---|---|
| Tipo de panel | WOLED |
| Resolución | QHD 2560 x 1440 píxeles |
| Frecuencia de actualización | 240 Hz |
| HDR | HDR10 |
| Contraste | 1500000:1 |
| Profundidad de color | 10 bit |
| Otros | Nvidia G-Sync AMD FreeSync ASUS OLED Care Flicker Free |
Empezamos por lo más evidente: estamos ante un monitor OLED, concretamente de tipo WOLED en este caso. Los paneles de este tipo son ampliamente conocidos en el mundo de las tecnologías de imagen por ofrecer la que probablemente sea la mayor calidad del momento.
El XG27 hace honor al nombre del panel que monta y ofrece un contraste prácticamente infinito y los negros puros que caracterizan a su tecnología, lo que se traduce en una imagen realista, vívida y profunda como ningún panel LED tradicional puede ofrecer.
Si a esto le sumamos una rapidísima velocidad de respuesta que evita la aparición de ghosting de ningún tipo, toda la profundidad de color y luces y sombras del HDR10 y una resolución QHD, que resulta óptima para las 26,5 pulgadas de diagonal que monta, estamos ante lo que en teoría tiene todo lo necesario para ser un rotundo 10.
Además cuenta con tecnología anti-parpadeo OLED de 3 niveles para reducir el molesto efecto cuando la frecuencia de actualización fluctúa en algunos contenidos y tiene un brillo bastante aceptable que, si bien sigue sin poder compararse con el de los paneles IPS, el único punto en que el OLED sale perdiendo, sigue siendo bastante adecuado siempre que la habitación no esté demasiado iluminada.
Además tenemos unos acabados tan cuidados como es de esperar en un producto de esta línea de ASUS, con múltiples tecnologías de protección de pantalla y una experiencia de uso que, en definitiva, sabe a premium se mire como se mire.
La opinión de Topes de Gama
Visto lo visto, estamos ante una ficha técnica que parece ser un 10 a todas luces al menos en teoría. ¿Pero qué pasa a la práctica? Como ocurre a menudo, depende del usuario.
Si acabas de hacerte con una tarjeta gráfica de nueva generación potente, especialmente una Nvidia RTX 5070 o superior, lo cierto es que las nuevas tecnologías de DLSS 4 piden a gritos un monitor como este.
Poder poner un juego recién lanzado a 240 fps en QHD con RT y en ultra es una gozada que no tiene desperdicio, y es que el Multi Frame Generation funciona especialmente bien cuando tus fps ya son altos y lo usas para dispararlos a cotas así de altas: ahí los artefactos se reducen al mínimo y la latencia también, surgiendo la mejor cara de esta tecnología.
Además el reescalado inverso DSR permite renderizar a la tarjeta a 4K nativos y luego hacer downscaling a QHD, lo que aumenta a su vez la calidad del DLSS y proporciona una imagen más nítida que a QHD nativo, aunque a costa de necesitar una importante potencia bruta, claro.
En este caso, sin duda este monitor es para ti: es un precio importante pero si ya te has gastado un dinero importante en un buen equipo gaming, sería una pena no sacarle todo el partido posible con un monitor a la altura.
Por el contrario, si tienes una gráfica menos potente y no piensas cambiarla pronto, tienes opciones más económicas que te permitirán conseguir resultados muy buenos, no siendo necesario invertir tanto en el monitor. Tampoco podemos recomendarlo si trabajas en el ordenador o dedicas muchas horas a programas con elementos estáticos en pantalla, ya que los quemados del OLED acabarán notándose y acortarás la vida de tu monitor.
| Pros (Lo que más nos gustó y por qué) | Contras (Lo que menos nos gustó y por qué) |
|---|---|
| ✅ Claridad en movimiento insuperable. La combinación de 240 Hz y el tiempo de respuesta instantáneo del OLED hace que la imagen sea nítida como el cristal incluso en los giros más bruscos. Es una diferencia que se nota y mucho viniendo de un IPS de 144 Hz. | ❌ El brillo en escritorio es solo correcto. Sus 215 nits medidos en modo SDR son suficientes, pero si tienes una ventana con luz solar directa detrás, echarás en falta más potencia. No es un monitor para trabajar en habitaciones muy luminosas. |
| ✅ El contraste infinito lo cambia todo. Jugar a títulos oscuros como 'Diablo IV' o ver películas en una habitación a oscuras es una experiencia inmersiva. Los negros son puros, no grises oscuros, lo que añade una profundidad increíble a la imagen. | ❌ Ausencia de puertos HDMI 2.1. Aunque para PC con DisplayPort no es un problema, es un fallo incomprensible en un monitor de esta gama y precio. Limita el aprovechamiento de una PS5 o Xbox Series X a 4K 120Hz. |
