Los Huawei FreeArc han llegado para revolucionar el mercado de los auriculares de conducción ósea, ofreciendo un equilibrio perfecto entre calidad de sonido, comodidad y diseño. Tras haberlos probado durante unas semanas, puedo decir que estos auriculares destacan no solo por su elegancia, sino por un rendimiento que supera con creces a otros modelos similares.
Estos auriculares son ideales para entrenamientos y actividades al aire libre. Merecen la pena ya que su precio, de 119 euros, va acorde a las características y al diseño premium que tiene. Hazte con ellos a través de este enlace.
Antes de empezar con el análisis más en profundidad, queremos aclararte que estamos hablando de unos auriculares de conducción ósea. ¿Qué quiere decir esto? Funcionan de manera diferente a los auriculares tradicionales, ya que en lugar de emitir el sonido directamente al canal auditivo a través de altavoces o almohadillas, transmiten las vibraciones del sonido a través de los huesos del cráneo, enviándolas directamente al oído interno. Gracias a esto, su construcción permite que sean seguros y estables al usarlos en todo tipo de circunstancias, pero sobre todo en actividades al aire libre.
Esto los convierte en la elección perfecta para deportistas, desde runners hasta ciclistas, o incluso si te gusta pasear con música, ya que pueden mantenerse alerta al tráfico y otros sonidos importantes
Diseño elegante y premium
Probé la versión en color gris y se trata de un acabado discreto, moderno y muy versátil, ya que no desentona en ningún ámbito. No resulta llamativo ni excesivamente deportivo, algo de lo que pecan muchos auriculares de este tipo, por lo que puedes usarlos tanto en entrenamientos como en el día a día sin que rompan con la estética. Su construcción es robusta y ligera, con un diseño en forma de C que se adapta perfectamente a la oreja. Por aquí llegamos al punto que más me ha gustado: los aros están construidos de tal manera que son flexibles y resistentes, lo que hace que se ajusten perfectamente a cada oído y no se caigan en ningún momento. Todo eso lo consigue sin ejercer demasiado presión.
De hecho, lo que más me ha sorprendido en este aspecto es la capacidad de los aros para amortiguar el movimiento, sobre todo si estás corriendo, evitando así cualquier incomodidad durante un uso prolongado de los FreeArc.
Calidad de sonido como pocas veces he probado
Por otro lado, al mismo nivel de excelencia pondría su apartado de sonido. He probado varios auriculares de este tipo, pero estos están claramente un nivel por encima. La nitidez del audio es sorprendente, sin rastro de distorsiones incluso a volúmenes altos. Gracias a la tecnología Reverse Sound Waves, el sonido se proyecta directamente al canal auditivo, evitando fugas y ofreciendo una experiencia envolvente.
Además, el equilibrio entre graves y agudos está muy bien conseguido, lo que permite disfrutar de música, podcasts o llamadas con una claridad excepcional. A pesar de su diseño abierto, el aislamiento es notable, lo que hace que la música se sienta potente y definida en cualquier entorno.
Y ligado a esto tengo que mencionar su único problema. Ese aislamiento que consigue Huawei hace que pierdas demasiado la noción de lo que está pasando a tu alrededor. Por tanto, si sales a correr, es posible que tengas que bajar un poco el volumen de la música para poder escuchar a los coches o al resto de personas que están en la calle, para evitar así accidentes. No es nada extremo, pero lo dicho, tendrás que regular el volumen.
Comodidad y seguridad
Los auriculares deportivos suelen tener un gran problema, y es que pueden resultar incómodos o moverse demasiado durante la actividad física. Con los FreeArc, esto no ocurre en absoluto. En mi experiencia, se han mantenido en su sitio sin necesidad de reajustarlos ni una sola vez. Su diseño abierto y la suavidad de los materiales hacen que prácticamente olvides que los llevas puestos. Esto es clave para entrenamientos intensos, ya que permite concentrarte sin distracciones y sin tener que parar a colocártelos.
Eso sí, aunque la comodidad es sobresaliente, cada usuario tendrá una adaptación diferente según la forma de sus orejas. En mi caso, la experiencia ha sido impecable, pero es posible que en algunas personas el ajuste no sea tan perfecto.
Teniendo en cuenta que Apple lanzó hace unas semanas los nuevos PowerBeats Pro 2, Huawei presenta su competidor a la mitad de precio que la alternativa de la compañía californiana, y lo mejor de todo es que no notarás diferencia, más allá de la exclusiva función de detector de frecuencia cardíaca de los PowerBeats nuevos.
Si los sacamos a la palestra junto a otras alternativas, los FreeArc diría que son más estables y cómodos. La silicona de sus aros hace que en entrenamientos prolongados, en los que sudamos y se producen roces, no haya ningún tipo de irritación de la piel. Eso, personalmente, es algo importante para mí, ya que con otras marcas he tenido molestias en este aspecto. Otros, por ejemplo, unen ambos auriculares con una especie de cable que puede rozarte el pelo continuamente y ser molesto. Y sumado a este punto, me gustaría destacar su autonomía, que frente a la competencia, destaca considerablemente.
Los Huawei FreeArc son, sin duda, los mejores auriculares para deportistas que he probado. Su sonido es excepcional, sus acabados son elegantes y discretos, y su ajuste es tan cómodo que apenas se sienten. Para hacer deporte o trabajar con ellos puestos durante todo el día, son una opción difícil de superar.
Si quieres unos auriculares con un sonido de primera y máxima comodidad, estos son una apuesta segura. Solo hay que tener en cuenta que su aislamiento puede ser excesivo en algunos casos, especialmente en exteriores. Más allá de eso, Huawei ha logrado un producto sobresaliente que cumple con creces su propósito.