Si el transporte público te desespera, el coche te vacía la cartera y caminar te parece un castigo medieval, ha llegado la hora de considerar una bicicleta eléctrica plegable. Y ojo, porque Carrefour no se ha quedado atrás: tiene modelos con potencia, estilo y ruedas listas para enfrentarse al asfalto… y a tus excusas.
Las bicis eléctricas plegables han pasado de ser un capricho de urbanita hipster a una solución práctica, ecológica y bastante potente para el día a día. Si además necesitas que se pliegue como una navaja suiza para meterla en casa o en la oficina, la cosa se pone seria. En Carrefour hay modelos que combinan buena autonomía, motores robustos y diseños compactos. Pero no todos son iguales. Vamos a ver qué ofrece cada uno, con sus virtudes, defectos y ese puntito que puede enamorarte a primera pedalada.
Modelo | Destacamos | Precio |
Compacta, ligera y perfecta para ciudad, esta bicicleta plegable combina simplicidad con funcionalidad a un precio razonable. | ||
Tan pequeña como práctica, ideal para trayectos cortos y usuarios que valoran la portabilidad extrema sin renunciar a un diseño moderno. | ||
Un auténtico monstruo sobre ruedas con motor de 750W, ruedas todoterreno y un rendimiento que roza lo salvaje. | ||
La más equilibrada y potente del grupo, con gran autonomía, diseño accesible y una estética muy cuidada. |
Orus E-1000: la ciudad a tus pies
La Orus E-1000 es como ese compañero de trabajo puntual, fiable y que nunca se queja. Con ruedas de 20″, esta bici plegable está pensada para desplazamientos urbanos, con una estética sobria pero elegante. Su motor de 250 W puede parecer modesto comparado con otros, pero cumple de sobra para moverte entre el tráfico con agilidad y sin sudar.
Su mayor virtud es lo equilibrada que es: batería integrada que da para más de 50 km, sistema de cambio Shimano de 6 velocidades y un sistema de plegado rápido que la hace perfecta para llevar en el maletero o guardarla en el trastero. Eso sí, si buscas emociones fuertes o caminos empinados, puede quedarse un poco corta.
La Orus E-1000 se ha ganado el corazón de muchos urbanitas que buscaban una bici eléctrica sencilla, práctica y que no les dejara tiesos el primer mes. En las reseñas se destaca lo ligera que es y lo fácil que resulta plegarla y guardarla, incluso en pisos pequeños. Para quienes van y vienen en transporte público o tienen que subir escaleras, es casi un regalo. El motor de asistencia cumple con lo prometido: no es para subir puertos de montaña, pero sí para moverse por ciudad sin despeinarse. Los usuarios valoran también la autonomía y el diseño compacto, ideal para trayectos cortos y medios. Eso sí, hay quien comenta que el sillín podría ser más cómodo para rutas largas, aunque eso se soluciona con un cojín de gel de toda la vida. En resumen, una bici que cumple sin florituras y se adapta muy bien al ritmo de ciudad.
DYU D3F: pequeña pero matona
La DYU D3F es como el patinete eléctrico que ha decidido apuntarse al gimnasio. Compacta, ligera y con una estética futurista, esta bici no solo es plegable: es mini y manejable. Su motor de 250 W y batería de 36 V no están pensados para conquistar montañas, pero en ciudad va como un tiro.
Perfecta para trayectos cortos o para combinar con otros transportes, tiene pedales (sí, por si te da por hacer ejercicio), luces LED y hasta una pequeña suspensión trasera que suaviza los baches. Ideal si tu prioridad es la portabilidad extrema y el estilo. Eso sí, si eres alto o necesitas más autonomía, puede quedarse en bici de apoyo.
Los comentarios positivos se centran en su diseño minimalista y moderno, que llama la atención allá por donde pasa. A pesar de su tamaño compacto, los usuarios dicen que sorprende por su empuje, ideal para moverse entre coches o evitar atascos sin esfuerzo. Muchos destacan que, al tener pedales, cumple perfectamente con los requisitos legales y además te permite “colaborar” cuando quieras quemar algo de energía. Es perfecta para trayectos urbanos o recados rápidos, y gusta mucho a quienes trabajan con ella a diario, tipo riders o estudiantes. También se valora que venga montada casi por completo y con buenos acabados. El único “pero” que se repite es que no tiene una suspensión muy allá, así que si hay baches o aceras guerreras… lo vas a notar.
Engwe EP-2 Pro: potencia bruta y neumáticos de tanque
Ahora entramos en terreno serio. La Engwe EP-2 Pro no es solo una bici eléctrica, es casi una moto camuflada. Motor de 750 W, batería de 48 V y 13 Ah, ruedas gordísimas de 20″ x 4″ y diseño robusto. Esta bestia está pensada para comerse cualquier terreno, desde el asfalto más liso hasta caminos de tierra o nieve.
Tiene suspensión delantera y trasera, frenos de disco, pantalla LCD y cambios Shimano de 7 velocidades. No es la más ligera del grupo, ni la más barata, pero si quieres potencia, autonomía y capacidad todoterreno sin renunciar a la opción de plegarla, esta puede ser tu joya escondida.
Con la Engwe EP-2 Boost la cosa cambia de nivel: esta bici es puro músculo. En las opiniones no faltan piropos a su potencia y a lo bien que se comporta en todo tipo de terrenos. Los neumáticos anchos hacen que parezca más una fat bike de aventura que una bici urbana, y eso a la gente le encanta. Muchos usuarios comentan que la han llevado por pistas de tierra, caminos rurales y hasta por arena compacta, y que se ha portado como una campeona. El plegado es más robusto que otros modelos, pero eso también la hace más estable. Se habla muy bien de la autonomía, con recorridos de más de 80 km sin despeinarse. Eso sí, hay que tener en cuenta que pesa lo suyo, así que no es para subirla al cuarto sin ascensor. En general, una bestia pensada para quienes quieren una bici eléctrica versátil, con alma de exploradora.
Cmacewheel Y20: autonomía de sobra y diseño urbano
La Cmacewheel Y20 es como una Engwe Pro, pero con traje de chaqueta. También ofrece 750 W de potencia y una batería de 48 V, pero sube la apuesta con una capacidad de 18 Ah, lo que se traduce en una autonomía que puede superar los 80 km en condiciones óptimas.
A pesar de su motor potente, su diseño es algo más compacto y estilizado. El cuadro bajo la hace más accesible, ideal para quienes no quieren levantar la pierna como si estuvieran saltando una valla. Además, sus acabados negros mate le dan un look elegante y moderno. Si buscas una mezcla de autonomía, diseño y potencia, esta bici merece mucho la pena.
Quienes la han comprado están encantados con su motor de 750W, que tira como un demonio en cuestas, salidas rápidas y adelantamientos épicos. Si la Engwe era potente, esta va un paso más allá, y eso se nota en cada comentario. También se habla mucho de su batería de 18 Ah, que aguanta jornadas largas de ruta sin que tengas que estar mirando el cargador cada dos por tres. El cuadro bajo gusta a quienes buscan subir y bajar cómodamente, y el diseño en negro mate tiene su punto elegante. Algunos usuarios comentan que viene muy bien equipada y con todo lo necesario para el día a día. Eso sí, por su potencia y tamaño, es un modelo pensado para quienes tienen sitio para guardarla y buscan una e-bike casi tipo scooter, pero sin perder el pedaleo. Ideal para los que no quieren límites.
¿Cuál elegimos nosotros?
Después de comparar todos estos modelos, nuestra elección es la Cmacewheel Y20. Porque no solo tiene un diseño cómodo y elegante, sino que su batería de 18 Ah y su motor de 750 W nos dan la libertad de movernos sin preocuparnos de recargar cada dos por tres. Es la bicicleta que lo tiene todo: potencia, autonomía, plegabilidad y una estética que no pasa desapercibida. Para nosotros, es la que mejor encaja con un día a día potente y sin límites.
