Hay una enorme expectación respecto de cómo será el Samsung Galaxy X, el móvil que celebraría el décimo aniversario de los topes de gama de la firma coreana. Se espera que sea un móvil con pantalla flexible, no plegable y hoy hemos conocido una información aún más sorprendente. Que el Samsung Galaxy X podría contar con tres pantallas.
Se está especulando mucho con este esperado tope de gama de Samsung, tanto que incluso se ha rumoreado una nueva versión de sus relojes Gear, también con un diseño similar al del teléfono, quien sabe si con una pantalla flexible también.
Ni una ni dos, tres pantallas para el Samsung Galaxy X
Las informaciones que hemos conocido hoy nos describen un terminal verdaderamente sorprendente y revolucionario en su concepción, ya que no tendría nada que ver con lo que hemos conocido hasta ahora. Estas informaciones apuntan a que el nuevo teléfono contaría con dos pantallas de 3,5 pulgadas flexibles, que una vez se desplegaran ofrecerían una pantalla de nada menos que siete pulgadas, como la de las tabletas más compactas.
Lo más sorprendente es para lo que serviría la tercera pantalla, y que no tendría nada que ver con lo que hemos visto hasta ahora, como por ejemplo en el ZTE Axon M que cuenta con dos pantallas que puede plegar y desplegar. En este caso, una vez desplegadas las dos pantallas, contaríamos con una tercera pantalla en la parte posterior de esta pantalla. De esta forma, cuando se pliegue la gran pantalla de siete pulgadas formada por las dos más pequeñas, contaremos con una pantalla tradicional para utilizar el teléfono como siempre. Se trataría de un dispositivo híbrido entre teléfono móvil y tableta, aunque con una factura realmente sorprendente en su concepto.
Así que en el modo teléfono, tendríamos un móvil tradicional, mientras que al desplegar su pantalla flexible contaríamos con una gran pantalla de siete pulgadas con la misma calidad de las que nos acostumbra Samsung en sus teléfonos. Recordemos que se han escuchado informaciones que apuntaban a que Samsung ha estado enseñando este nuevo móvil durante el pasado MWC 2018, por lo que podría estar ya en una fase de desarrollo realmente avanzada. La diferencia esencia de este tipo de móviles respecto del ZTE Axon M que hemos conocido el año pasado es que la pantalla sería completamente flexible, y no estaría unida por un puente como en el caso del terminal chino, lo que sin duda supondría toda una revolución en el mercado. Un móvil que no cabe duda de que entraría de forma instantánea en el Top 10 de móviles de Topes de Gama por derecho propio.