Primeras impresiones de los Samsung Galaxy S8 y Galaxy S8+
Ya hemos tenido la posibilidad pasar un rato con el Samsung Galaxy S8 y el Samsung Galaxy S8+. No muy largo, todo hay que decirlo, pero ha sido suficiente para poder tener unas primeras impresiones de lo que ofrecen estos nuevos dispositivos que han sido anunciados hoy mismo -y de lo que hemos dado buena cuenta en Topes de Gama-. Te contamos las sensaciones que tuvimos al utilizar los nuevos gama alta de la compañía coreana.
Las dos versiones nos han dejado un muy buen sabor de boca en líneas generales, ya que sus acabado son realmente atractivos -sin que le falte curvatura a las pantallas y teniendo en el metal el material de fabricación utilizado-. Evolucionan bien desde el modelo al que sustituyen en el mercado. La sensación, eso sí, es que se han elegido detalles de los últimos modelos del fabricante para juntar los mejores y, de esta forma, obtener un dispositivo atractivo a la vez que dispone de una buena ergonomía.
Los botones se mantienen bien ubicados. En los nuevos Samsung Galaxy S8 los frontales táctiles, Home incluido, pasan a mejor vida y, ahora, estos se sustituyen por unos integrados en la pantalla -el principal con cierta respuesta a la presión-. Por extensión, el lector de huellas está situado al lado de la cámara trasera. Un lugar algo alto la verdad, y que no es especialmente acertado para su acceso (pero la respuesta es muy buena).
Se mantiene el puerto de auriculares, lo que es todo un acierto a nuestro entender, y no le faltan a los Samsung Galaxy S8 conectividad USB tipo C, LTE (Cat.16, nada menos) y, también, soporte para Gigabit, por lo que se está preparado par el futuro. En cuestiones de seguridad avanzada, hay que destacar que se dispone de reconocimiento de iris, como en el Samsung Galaxy Note 7, y se añade el facial, que funciona muy bien y con gran fiabilidad. Por aquí puede pasar parte del futuro para la compañía coreana.
Rendimiento muy bueno
Sin poder tener unos resultados concretos por el momento, las sensaciones que nos dejaron los Samsung Galaxy S8 fueron muy buenas. El procesador Exynos 8895 se muestra más que solvente (y habrá que ver cómo esos 10 nanómetros se notan en el día a día). La RAM es de 4 GB, donde quizá se podía esperar algo más por parte de la compañía coreana. Eso sí, mover Android Nougat con una capa de personalización cada vez mejor y más minimalista -ahora llamada Samsung Experience- no es precisamente un problema, como pudimos comprobar.
El almacenamiento se sitúa en los 64 GB, una marca adecuada, que es posible ampliar con el uso de tarjetas microSD. Aparte, hay que comentar que las pantallas son de 5,8 para el Samsung Galaxy S8 y de 6,2 para el Samsung Galaxy S8+-. En ambos casos con resolución QHD+ y con una calidad que salta a la vista en cuanto se tiene delante. Pero, esto, ciertamente es algo esperado ya que los paneles SuperAMOLED son cada vez mejores.
La batería es un detalle que nos ha dejado un sabor algo agridulce. Lo cierto es que incluye carga rápida e inalámbrica, lo que es muy positivo. Pero las cargas no son especialmente altas, y veremos cómo se comporta en el uso habitual. Hablamos de 3.000 mAh para el Samsung Galaxy S8 y de 3.5000 en el caso del Samsung Galaxy S8+. Aquí debemos esperar a las pruebas más concretas para dar una opinión (lo mismo que ocurre con las cámaras, que son de 12 megapíxeles la principal con apertura F:1.7 y de 8 Mpx la delantera en las dos variantes anunciada).
Detalles finales
Hay que decir que con el Samsung Galaxy S8 llegan una buena cantidad de servicios añadidos, como por ejemplo el asistente Bixby -que tiene en su reconocimiento por imagen un elemento diferencial, pero que no llega en un primer momento con el idioma español- y la base DeX, que permite dar uso a los Samsung Galaxy S8 como si de un ordenador se tratase, conectándolo a un monitor y con un sistema de ventanas de los más atractivo y funcional. Aparte, no falta una nueva versión de la cámara 360 con avances como una grabación a 4K, nuevas fundas y bases de recarga inalámbrica.
En definitiva, sensaciones muy buenas en líneas generales las obtenidas en esta toma de contacto de los nuevos Samsung Galaxy S8. Tienen algunos detalle que se deben probar de forma concreta (como la cámara y la autonomía), pero lo que está muy claro es que se ha realizado un buen trabajo con los Samsung Galaxy S8, en especial con su diseño y nuevas opciones de uso.