A la vez que se va avanzado en la potencia de los procesadores que se utilizan en los smartphones, así como en la cantidad de RAM que estos incluyen, también se hace lo propios en los componentes necesarios para el acceso a los datos en movilidad. Y un ejemplo es el que se ha conocido que llegará en los futuros Samsung Galaxy.
La compañía coreana ha desarrollado un nuevo módem integrado que permitirá que las velocidades sostenidas de descarga alcancen los 1,2 gigabits, por lo que serán de las más rápidas del mercado. Esto, por lo tanto, permitirá que el consumo de contenidos sea mucho más eficiente –por estable- en condiciones de movilidad, por lo que se compite de tú a tú con Qualcomm a la espera de la llegada del 5G, algo para lo que todos los fabricantes se ven posicionando y que promete ser una revolución para los usuarios con opciones de uso que ahora mismo no son posibles.
El caso es que se alcanza el denominado Cat.18 para LTE, que supone una mejora de su rendimiento de un 20% a la hora de descargar información, lo que no es precisamente poco. Evidentemente, es de esperar que los futuros terminales de referencia de la compañía coreana, como son los Samsung Galaxy S y Note, sean los que disfruten el año que viene de estas novedades. El caso, es que según se ha informado se podrá conseguir por completo una película en Alta Definición en un tiempo de 10 minutos, un salto realmente interesante que a los que tienen cuentas en Netflix, por poner un ejemplo, seguro que les llama la atención.
Otras mejoras para los Samsung Galaxy
A la espera de conocer cómo se integrará el nuevo módem anunciado por la compañía coreana (todo apunta al uso de sus propios procesadores Exynos como elemento indispensable), no se ha indicado que exista una mejora en otros apartados. De esta forma, se mantiene una modulación más eficiente para el envío de datos y, como no, se implemente tecnologías que permiten optimizar que ser realicen varias descargas sin que la velocidad de estas se vea afectada excesivamente (un ejemplo es MIMO 4×4). Eso sí, todo esto ya es parte de LTE Gigabit.
Según se ha informado, la producción del nuevo módem comenzará antes de que acabe este año 2017, por lo que todo apunta a que el Samsung Galaxy S9 y el Samsung Galaxy Note 9 serán los primeros modelos que podrán disfrutar de este componente que, sobre el papel, permitirá una experiencia de consumos de datos en movilidad excelente. Esto será especialmente así a la hora de consumir de contenidos y, también, para realizar videoconferencias o trabajos intensivos de vídeo sin disponer de conexiones WiFi.