El Samsung Galaxy S9 contará con una batería mayor gracias a esta nueva tecnología
Estamos a punto de ver todas las novedades del Samsung Galaxy Note 8 y ya estamos empezando a ver los primeros rumores del Samsung Galaxy S9. Hoy conoceremos una nueva tecnología que implementará que hará que su batería sea más grande de lo normal en todos los smartphones, aumentando aún más que este año su autonomía.
Antes de poder analizar el Galaxy S8, todo el mundo pensaba que su batería iba a ser mala, incluso mediocre. Esto era debido a que implementaban una pantalla mayor que el año pasado, mucho mayor, pero la batería se mantenía, lo que significaría un consumo mucho peor. Esto se vio que no era así en las reviews, ya que gracias a su procesador de 10 nanómetros, nos encontrábamos que tenía una eficiencia energética mucho mayor que el año pasado.
Samsung Galaxy Note 8: nuevas imágenes y detalles de su batería
Esta eficiencia energética puede servir de mucho en caso de que un fabricante consiga poner una batería enorme en su móvil, y esto no es del todo descabellado ya que cada vez las baterías son más pequeñas aumentando la densidad de miliamperios, las pantallas más delgadas y los procesadores más pequeños, por lo que poco a poco estamos viendo que los componentes de los smartphones son más pequeños para dejar espacio a otros componentes.
La batería del Galaxy S9, más grande que el año pasado
Esta batería será más grande gracias a la nueva tecnología que incorporarán. Esta tecnología llamada SLP será capaz de configurar de manera diferente todos los componentes y circuitos del móvil. Lo que significará que los componentes estarán más juntos de lo normal en un smartphone. Esta tecnología no la puede desarrollar ahora todo el mundo, pero una de las compañías que sí puede es Samsung.
Samsung incorporaría en todos sus Galaxy S9 con Exynos esta nueva tecnología que nos permitiría tener una batería mucho más grande, ¿pero y los móviles Samsung con Qualcomm no lo tendrían? En un principio no, por lo que llevaría quizá a Samsung a tomar diferentes decisiones: el volver a colaborar con Qualcomm para fabricar un procesador de gama alta, o el de prescindir de Qualcomm para su modelo estadounidense. Lo que queda claro es que Samsung quiere apostar de lleno por esta nueva configuración.
Este ahorro de espacio, aparte de una mayor batería, también podría hacer que tengamos una cámara mucho mejor y un diseño mucho más delgado. La cámara también depende del tamaño del sensor, por ello las cámaras delanteras, al tener menos espacio, son generalmente peores. Su diseño también se puede ver alterado por esta tecnología para ser más delgado y compacto, lo que haría posible un smartphone todo pantalla.
Se supone que esta tecnología ya está en desarrollo, y Samsung quiere ponerla ya a prueba. No llegará, obviamente, al Note 8, pero a todos los demás smartphones de gama alta de Samsung seguramente sí, por lo que nos podemos encontrar, otra vez, un nuevo Samsung Galaxy S para la gama alta innovador y revolucionario, tanto en el diseño como en el apartado del hardware.