Arreglar un terminal móvil es algo que, antes o después, a casi todo el mundo le toca hacer. Ya sea por un problema de software o de hardware, de vez en cuando aparece un problema que requiere recurrir al SAT oficial (Servicio de Asistencia Técnica). El coste puede ser más o menos elevado, dependiendo mucho de la facilidad con la que es posible acceder al interior del dispositivos. Pues bien, te indicamos cuál es el teléfono de gama alta de 2016 que es más sencillo de reparar por este motivo.
El listado llega desde iFixit, una página que se ha especializado en desmontar pieza a pieza cada uno de los terminales que analiza (generalmente, y debido al esfuerzo requerido, suelen trabajar con dispositivos atractivos). El caso es que se ha publicado un listado con el que es posible conocer cuál es el teléfono de gama alta de 2016 que mejor puntuación ha obtenido en sus pruebas y, por extensión, también se indica el que tiene un acceso a su interior más complejo y que a buen seguro es una pesadilla para los técnicos.
El teléfono de gama alta de 2016 que ha ganado
Era algo que se sospechaba desde el mismo día que se anunció el terminal, algo que ocurrió en el Mobile World Congress de 2016, ya que hablamos de un dispositivo modular. Evidentemente nos referimos al LG G5, un dispositivo que tiene el honor de ser el teléfono de gama alta de 2016 que mejor se repara, ya que consigue una puntuación de ocho sobre diez. No está nada mal. Un detalle en el que se hace mucho hincapié es en el de poder retirar la batería de fom manual, lo que facilita mucho el trabajo.
En el siguiente escalón están los dos nuevos modelos de Google, PIxel y Pixel XL. El dispositivo fabricado por HTC para la compañía de Mountain View permite un acceso realmente sencillo a su interior sin necesidad de ser modular -el lado más negativo es que si no se tiene mucho cuidado es posible romper la pantalla al abrirlo-. Obtiene un 7 sobre 10 y, por algunos pequeños detalles, le hacen superar a la nueva gama iPhone 7 de Apple entre los teléfono de gama alta de 2016 que mejor se reparan. La razón principal para estar detrás del de Google es que es necesario el uso de demasiada herramienta en el proceso de desmontaje.
Curiosamente, y como se ve en iFixit, las dos últimas posiciones la ocupan dispositivos de Samsung. Lo cierto es que el trabajo de miniaturización de los terminales de la compañía coreana, así como el uso de paneles curvos, son razones que han pesado bastante en ello. Con un cuatro se queda el «difunto» Galaxy Note 7 con una gran dificultad en cambiar la batería (sic) y, justo detrás de este, está la gama Galaxy S7, donde el uso del cristal junto a pegamento ha sido algo complicado de superar para los técnicos.